Cerca de 10 minutos después de decidir temporalmente eliminar Google de mi vida -–un experimento que esperaba me revelaría qué tanto el gigante de Alphabet domina la existencia en línea-- lo eché todo a perder.

Encontré un video de Donald Glover, coprotagonista de ‘Solo: A Star Wars Story’, dando un tour por el Halcón Milenario. Incluso con mi guardia más cuidadosa, aun así pulse el botón rojo de reproducción. Segundos después, me di cuenta de que estaba viendo YouTube --YouTube de Google.

Google está tan entretejido en la red internet que es casi imposible evitarlo. Es donde miles de millones de usuarios encuentran, crean y almacenan información importante, donde trabajan y se distraen. Puede salir de Facebook o tomarse un descanso en Twitter, y apenas darse cuenta, salvo por una mayor sensación de aburrimiento haciendo cola en Starbucks. A Google, usted lo extrañaría.

Incluso más que otras compañías que ofrecen servicios gratuitos, Google recopila cantidades asombrosas de datos sobre usted y las utiliza para vender anuncios. Estoy contento con Google, porque hasta la fecha no ha habido informes de violaciones catastróficas o escándalos de intercambio de datos al nivel de la pesadilla Cambridge Analytica de Facebook. Si Google tiene una fuga, eso podría ser desastroso.

Es por eso que me propuse dejar el planeta de productos y servicios interconectados de Google. Cuando lo hice, me sorprendí al descubrir cuántas alternativas fuertes habían sobrevivido su atracción gravitatoria.

 

Intercambiando lugares

Renunciar a Google requiere algo más que únicamente teclear “bing.com”. Borré 16 aplicaciones de mi celular, desde Gmail, Google Maps y hasta Google Photos. Desconecté mi Google Home, también Chromecast de la parte trasera de mi televisor, y apague mi Chromebook. Por suerte no tengo un termostato Nest, o esto se hubiera convertido en un proyecto de reconstrucción.

Antes no me había percatado de cómo mi vida había girado en torno a los productos Google. Para reemplazarlos, traje un Amazon Echo y una Microsoft Surface Laptop. Usé la aplicación Notion y Dropbox Paper para tomar notas y crear documentos, y renuncié a mi lealtad y corté el cordón con YouTube TV por Sling. Eliminé el navegador Chrome de todos mis dispositivos e instalé Firefox en su lugar.

La mayoría de los servicios de Google tienen reemplazos directos: Office Online gratuito de Microsoft en lugar de Docs y Sheets; Signal por Hangouts; Evernote por Keep; y Flipboard por Google News.

En muchos casos, puede descargar mis datos de Google utilizando su servicio Takeout, subirlos a una nueva aplicación --por ejemplo, llevando su correo electrónico y calendarios a Outlook-- y difícilmente perder algo. Los usuarios de iPhone que cambian su motor de búsqueda a Bing o DuckDuckGo, y que usan las aplicaciones de productividad de Apple rara vez se topan con Google.

Durante mi tiempo sin Google, lo que más extrañé fue Maps, Photos y YouTube. Existen otros servicios de navegación (¡MapQuest Live!), pero ni siquiera el nuevo Apple Maps puede superar a Google Maps para recorrer el mundo real. Mi cuenta de Google Photos contiene años de recuerdos, y la búsqueda inteligente de fotos de Google es por mucho la mejor.

YouTube, mientras tanto, es la mejor aplicación para encontrar videos en internet. Vimeo tiene proyectos interesantes, pero es un puño de arena frente a la playa de YouTube. Sin YouTube, estoy seguro de haberme perdido docenas de avances cinematográficos, videos musicales, videos nocturnos y útiles tutoriales que hubiera disfrutado de otra manera. Ese dominio es una preocupación, especialmente cuando YouTube está bajo escrutinio por permitir --e incluso recomendar-- videos falsos y atroces.

 

Un toma y daca

A medida que los productos de Google han invadido nuestras vidas, también se han vuelto más aislados y cerrados. Google Search trata de responder sus preguntas sin siquiera llevarlo a otro sitio. Las mejores funciones de seguridad de Gmail son una molestia cuando se usan, excepto para otros usuarios de Gmail. El navegador Chrome es la mayor ofensa: algunos servicios de Google, como Google Earth, solo funcionan en Chrome, aunque Google dice estar cambiando eso.

Traducido por Michelle del Campo  

Editado por Luis Felipe Cedillo

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Fecha de publicación: 11/06/2018