El servicio de flujos de música sobre pedido, también conocido como streaming, es el futuro de la música. Aunque francamente ya es el presente: servicios como Spotify y Apple Music ya representan casi dos tercios de los ingresos de la industria de la música.

En lugar de comprar una canción o un álbum, la mayoría de las personas eligen pagar alrededor de 10 dólares mensuales para tener acceso ilimitado a decenas de millones de canciones.

Demasiado accesible como para que regrese el clásico casete o los DVDs.

Si aún no ha puesto sus cajas de CDs en el armario, este es el momento de hacerlo. Los servicios de flujos de música a la orden ofrecen más música y herramientas mucho mejores para encontrarla, reproducirla y disfrutarla. Puede usar un asistente de voz para buscar canciones o sintonizar listas de reproducción creadas específicamente para que coincidan con sus gustos.

Con pulsar unas cuantas teclas, puede musicalizar su sesión de ejercicio o su día de trabajo. Puede descubrir un gigantesco mundo musical que quizás nunca haya encontrado, ni siquiera navegando la mejor tienda de discos.

¿No obstante, qué servicio de transmisión debería usar? Debe elegir bien porque sin importar por cuál se decida, éste se hará realmente cargo del asunto: reproducirá sus melodías favoritas, sugerirá listas de reproducción y aprenderá todo sobre sus gustos.

Pero esto no sólo se trata de elegir el que tiene precisamente en su acervo “Stairway to Heaven” (Escalera al Cielo de The Who): muchos de ellos ahora lo tienen todo. Entonces, ¿cómo elegir?

Para empezar, hay muchos servicios, aunque solo existen cuatro verdaderos contendientes: Spotify, Apple Music, Amazon Music y el nuevo YouTube Music de Google.

Los cuatro ofrecen enormes bibliotecas de canciones y son accesibles en casi todas partes.

La popular Pandora no está en mi lista porque todo lo que ofrece --radio y flujos de música sobre demanda --lo hacen mejor otros servicios.

Entre los cuatro grandes, ningún servicio sobresale claramente del resto. Cada uno tiene ventajas sobre la competencia, y también serias deficiencias. Así es como éstos difieren en las cinco funciones que componen un excelente servicio de música.

 

Precio

Los cuatro servicios son sorprendentemente similares: 10 dólares mensuales por usuario y 15 por familia de hasta seis personas. Si ya es miembro de Amazon Prime (que probablemente lo sea), puede obtener la experiencia completa de Amazon Music por únicamente ocho dólares mensuales o una biblioteca más pequeña sin costo adicional. Todos, excepto Apple Music, ofrecen versiones gratuitas compatibles con publicidad, y también, con funciones limitadas.

 

Contenido

Lo sé, mencioné que todos tienen más o menos la misma biblioteca de canciones. Sin embargo, cada servicio ofrece un contenido exclusivo.

Apple Music gana puntos por su estación de radio Beats 1, que a menudo ofrece entrevistas exclusivas y grupos de DJs invitados de artistas famosos. Apple también le permite combinar su biblioteca local con el flujo de música seleccionado.

YouTube Music lo hace aún mejor: no solo alberga todas las canciones que está buscando, sino también innumerables videos musicales, remixes, covers y actuaciones en vivo que ya están en YouTube. YouTube Music no integra esas cosas en su aplicación especialmente bien, pero ningún otro servicio se acerca a su biblioteca general.

 

Curaduría

Dado que revisar una biblioteca infinita parece que consume un poco de tiempo, los cuatro servicios intentan ayudarle a encontrar algo para escuchar. Piense en ellos como Fonzie [el protagonista de la serie setentera 'Happy Days'] manejando la rockola de su cafetería predilecta. Los cuatro tienen listas de reproducción y canciones para cantar en el automóvil, y parece que suelen sugerirlas en el momento adecuado.

Apple tiene una excelente lista de reproducción de lanzamientos semanales personalizados llamada New Music Mix, pero Spotify lo lleva a otro nivel: sus listas de reproducción generadas algorítmicamente como Discover Weekly y Daily Mix ofrecen horas de música nueva y antigua seleccionada exclusivamente para usted.

 

Aplicaciones

Debe ser difícil crear una buena aplicación de música porque nadie parece capaz de hacerlo. Spotify es lenta para cargarla y complicada de usar, enterrando funciones básicas en sus menús. YouTube Music tiene una gran aplicación de internet, pero no ofrece funciones tan simples como ordenar alfabéticamente su biblioteca. Apple Music se ve muy bien en el iPhone (y ¡Android!), pero en una Mac, solo funciona dentro de la abotagada aplicación iTunes.

La aplicación móvil de Amazon es mi favorita, gracias a su interfaz nítida y su diseño sencillo, pero es horrible en internet. Los asistentes de voz han hecho que estas aplicaciones sean menos importantes, ya que solo tiene que pedir lo que desea escuchar y eso es todo, así que los servicios deberían dedicar más tiempo a mejorar sus aplicaciones en el futuro.

 

Ecosistema

Un servicio de música solo funciona cuando puedes usarlo. En ese sentido, su elección ya podría estar hecha. ¿Tiene un iPhone y estás pensando en un HomePod? Consiga Apple Music y use Siri para manejarla. Si eres una familia Alexa, Amazon Music funciona mejor. Si está empezando de cero, Spotify es el camino a seguir: está prácticamente omnipresente en todos los dispositivos, incluidos los altoparlantes Echo de Amazon, y la función Spotify Connect facilita el control de lo que se está reproduciendo --y dónde se reproduce-- desde la aplicación.

Después de semanas de probar los cuatro servicios, sigo siendo un usuario de Spotify. En parte, eso creo, se debe a que he sido usuario de Spotify durante la mayor parte de una década. He hecho cientos de listas de reproducción, y pasado miles de horas diciéndole al servicio lo que me gusta y lo que no. Spotify sabe qué música me gusta mejor que yo. No estoy enamorado del producto tanto como estoy intrincadamente apegado a él.

Si ya eres un amante de los servicios de música por demanda, realmente hay muy poco que pueda tentarlo para cambiar de servicios. YouTube Music, el servicio más nuevo, tiene un par de funciones interesantes, como un “mezclador sin conexión” que es constantemente actualizado y que asegura que siempre tenga pistas nuevas disponibles para viajar en el metro. No obstante, nada al respecto me hace querer dejar mi configuración actual.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo           

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Fecha de publicación: 30/07/2018