Nadie, ni siquiera los expertos en transporte como yo, tenían la sospecha de que los servicios de transporte privado por demanda vía una aplicación como Uber cambiarían nuestros hábitos de desplazamiento de forma rápida y espectacular.

Nunca en nuestra vida habíamos presenciado un cambio tan rápido en el transporte. A pesar de las protestas globales, el rechazo e incluso las prohibiciones absolutas, Uber se ha convertido en una fuerza política y social dominante, y en el proceso en una compañía valuada en 70 mil millones de dólares, en tan solo ocho años. Incluyendo a los competidores de Uber, como Lyft y Via, la industria del transporte compartido ha proporcionado más de 10 mil millones de viajes.

Pero las reverberaciones de las aplicaciones de uso compartido no son nada en comparación con lo que sucederá cuando los vehículos autónomos se conviertan en la norma. Esta nueva industria está en camino de convertirse en un negocio multimillonario, más grande que Amazon y Walmart juntos.

De acuerdo con el Foro Económico Mundial, la transformación digital de la industria automotriz generará 3.1 billones de dólares anuales en beneficios sociales al reducir el número de choques, el impacto de las emisiones de carbono y el costo de la propiedad de un automóvil, incluido el mantenimiento, combustible y los seguros.

Un estudio de Intel realizado en 2017 predijo que el mercado global de vehículos autónomos generará siete billones de dólares al año para 2050, tanto de forma directa (uso industrial) como indirectamente (ahorros de viajes más cortos y una menor necesidad de servicios de emergencia).

Todo lo que nos rodea se verá alterado por los vehículos autónomos: nuestras carreteras, nuestros almacenes e incluso nuestra definición de lo que puede ser un automóvil. Los autos del futuro apenas se parecerán a los vehículos que asfixian nuestras ciudades en la actualidad.

 

Almacenes toman el vuelo

La tecnología autónoma y los avances en otros campos darán lugar a “almacenes flotantes” similares a los blimpls, con drones que entregarán productos a las puertas de su casa (Amazon y Walmart han solicitado patentes para crear tal embarcación). Operados de forma autónoma o por un piloto humano remoto, estos almacenes, que vuelan entre los 150 y 300 metros de altura, reducirán los costos de entregar pedidos fincados en línea y la cantidad de camiones de entrega, en detrimento de los remitentes como FedEx y UPS.

 

Dígale adiós al diseño convencional automotriz

Los prototipos de los vehículos autónomos se asemejan a versiones aerodinámicas de los automóviles que se ven hoy en las carreteras. Pero los vehículos autónomos no se verán como los autos por mucho tiempo. “Una vez que se elimina la necesidad de un volante y un conductor, las posibilidades de diseño son infinitas”, dijo el diseñador de automóviles Dan Sturges.

Los autos podrían ser casas móviles compactas y con forma de huevo, o con forma de caja, y ofrecerán mucho más que movilidad. Serán nuestros asistentes personales y presentarán características flexibles de diseño: una estación de trabajo emergente que se convierte en una mesa para cambiar a los bebés, un gimnasio que se convierte en una sala de examen móvil que puede transmitir los resultados de las pruebas a su médico.

 

La calle multinivel

El diseño de autos drásticamente diferentes también significará caminos drásticamente diferentes. Al liberarles el nivel del suelo a los peatones y tiendas, los caminos subterráneos podrían reservarse para los autos autónomos. En lugar de líneas de carril y señales viales, una red de dispositivos inteligentes, integrados en vehículos e infraestructura, se comunicaría sobre la marcha para adaptarse al tráfico. El camino en sí mismo podría sugerir una ruta más rápida que tomar.

 

El fin de las motocicletas

Los vehículos sin conductor podrían ser la sentencia de muerte para las motocicletas. El número de usuarios de motocicletas ya está en declive. La tecnología autónoma empeorará las cosas. “Existe un riesgo muy real de que el motociclismo quede completamente fuera de la conversación”, concluyó un informe de 2017 de Give a Shift.

A medida que la autonomía haga que el transporte sea más seguro, los planificadores de ciudades, las compañías de seguros y los fabricantes de automóviles pueden ver las motocicletas como un peligro innecesario. El informe de la policía de un accidente el año pasado en San Francisco, en el que un automóvil sin conductor chocó contra una motocicleta, encontró culpable al motociclista.

 

"AV" Cumple ATV

La nueva tecnología de los automóviles autónomos (AV, por sus siglas en inglés) puede presentar una oportunidad para fabricar más vehículos todo terreno (ATV), especialmente para la industria automotriz. Honda está desarrollando un ATV que puede llevar casi cualquier cosa, excepto un conductor. Estas máquinas podrían ser utilizadas en diversos entornos, desde la construcción a la agricultura.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo           

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Fecha de publicación: 08/11/2018