24 de mar. (Bloomberg) -- Las empresas mexicanas que operan en Venezuela están teniendo que soportar un sistema que regula el mercado cambiario que drena sus ganancias.

Las perspectivas para las filiales venezolanas de empresas como Mexichem o Coca-Cola Femsa están empeorando luego que la caída en los precios del crudo y la inflación más rápida del mundo están erosionando el valor de la moneda local.

El bolívar se ha desplomado 64% en el mercado negro, mientras que un tercer tipo de cambio oficial está agregando a la confusión y distorsiones.

El fabricante de petroquímicos y tubos de plástico mexicano, Mexichem, perdió 33 millones de dólares por cambios en el valor de la moneda de Venezuela el año pasado después de que adoptó el tipo de cambio de 12 bolívares por dólar frente al de 6.3 bolívares.

Este trimestre, las ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización en Venezuela, serán de entre 20 y 35% del nivel de hace un año, dijo el director financiero, Rodrigo Guzmán, en una entrevista.

Del mismo modo, los resultados de Coca-Cola Femsa y su empresa controladora, Fomento Económico Mexicano (Femsa), están siendo afectados por los ajustes a un tipo de cambio de 50 bolívares por dólar.

"Las pocas empresas extranjeras que aún permanecen en Venezuela están sufriendo", dijo Raúl Ochoa, analista de la correduría Interacciones, en la Ciudad de México. "Estas no pueden vender inversiones o transferirlas, y no pueden convertir bolívares a dólares nada más porque quieran dejar el país. No hay manera de salir".

El presidente Nicolas Maduro ha reaccionado a una caída de 50% en el precio del petróleo en el último año y la aceleración de la inflación, mediante la introducción de un nuevo tipo de cambio.

Maduro está ampliando las políticas de control de cambios y de precios usadas por su difunto predecesor y mentor, Hugo Chávez, lo que ha provocado una escasez de suministros y una caída de la inversión extranjera.

Cemex, con sede en Monterrey, México, recibió 600 millones de dólares en compensación por los bienes incautados por Chávez en 2008 como parte de la nacionalización de la industria cementera que decretó el expresidente venezolano.

 

Desde Ford hasta Telefónica

Aún así, el cese de las operaciones en Venezuela, como lo hiciera Clorox el año pasado, la empresa de productos al consumidor de Estados Unidos, sería una decisión costosa para las empresas mexicanas, de acuerdo a Fernando Bolaños, analista de acciones de Grupo Financiero Monex.

     La determinación del valor de los activos de la empresa que quiera cerrar sus operaciones sería complicada por el sistema que regula el mercado cambiario. Ante la volatilidad de ese sistema el vendedor podría sufrir pérdidas adicionales, agregó Bolaños en comentarios enviados por correo electrónico.

Las dificultades para cambiar dólares por bolívares también socavaron las ganancias del cuarto trimestre de Ford Motor, Kimberly-Clark y Telefónica. El fabricante de pan y botanas mexicano, Grupo Bimbo, también informó de un deterioro de las ganancias registradas en Venezuela comparadas con años anteriores debido a la caída del bolívar.

Mexichem, que produce tubos y conectores de PVC a través de la filial Pavco de Venezuela, redujo sus ingresos de operaciones en Venezuela en 47% el año pasado, después de adoptar la llamada tasa Sicad.

La empresa, que es un inversionista a largo plazo en el país, de acuerdo a su director de finanzas, Guzmán, sólo representa 4% del flujo de efectivo total, de acuerdo con datos recopilados por Bloomberg.

 

Quedarse en el país

"No tenemos intenciones de irnos", agregó Guzmán en la entrevista que tuvo lugar recientemente. "Mientras podamos seguir haciendo negocios y seamos rentable, estaremos en una posición más sólida si hubiera un cambio de régimen o si mejora el entorno económico en Venezuela".

Coca-Cola Femsa, la mayor franquicia de la embotelladora Coca-Cola, redujo su saldo de cajas en aproximadamente 40% como resultado del ajuste del bolívar a la tasa Sicad II, ya desaparecida, de 50 por dólar, de acuerdo a documentos de la empresa.

Antes del ajuste, el dinero retenido en Venezuela representaba más de la mitad del saldo total en efectivo de Femsa de 800 millones de dólares, dijo el director financiero Héctor Treviño en una llamada para revisar los resultados de la compañía a finales de febrero. La empresa dijo que seguirá usando el tipo de cambio Sicad hasta que haya más claridad sobre la nueva cotización que se conoce como Simadi, dijo Treviño.

 

'Dinámica similar'

"El efecto negativo en nuestros resultados trimestrales reportados es significativo", dijo Javier Gerardo Astaburuaga, miembro del consejo de administración de Coca-Cola Femsa, sobre el impacto de la devaluación del bolívar en la conferencia telefónica de finales de febrero con los inversionistas de la compañía. "Esperamos una dinámica similar cuando reportemos los próximos trimestres".

El Banco Central de Venezuela elevó la tasa Simadi, el nuevo sistema de cambio de divisas del país introducido el mes pasado, a 187.78 bolívares por dólar recientemente.

A los niveles actuales, el ajuste al Simadi para una empresa como Femsa reduciría el dinero en efectivo que tiene en Venezuela en 73% y reduciría el saldo de caja total de la empresa en 7%, de acuerdo a cálculos de Bloomberg.

Bank of America predijo que el tipo de cambio Simadi, que comenzó a negociarse en 170 bolívares por dólar, llegará a 303 a finales de año.

"Los volúmenes de los productos vendidos en Venezuela por empresas como Femsa siguen siendo altos", dijo Ochoa. "Pero la tasa de cambio simplemente está fuera de control."

 

Prácticamente pérdidas

El flujo de operación de Mexichem, que cayó 14% en el cuarto trimestre contra el mismo periodo del año anterior, hubiera aumentado 3% si la empresa no hubiera incurrido en pérdidas debido al tipo de cambio de Venezuela, reportó la compañía en su informe de resultados.

     Femsa y Bimbo no respondieron a las llamadas o correos electrónicos en busca de sus comentarios al respecto.

Telefónica, que brinda el servicio de telefonía celular bajo la marca Movistar en Venezuela, reportó las menores ganancias operativas en el cuarto trimestre en más de una década, después de depreciar el valor de su unidad de cambio en Venezuela.

Telefónica redujo el valor de sus activos venezolanos en 2,800 millones de euros (3,000 millones de dólares) después de cambiar de la tasa de 12 a 50 bolívares por dólar.

El bolívar ha caído 97% en tres años.

"La economía venezolana está cerca del colapso total", dijo Ochoa. "Las inversiones hechas ahí están prácticamente perdidas".

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Eduardo García

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Fecha de publicación: 24/03/2015