25 de ago. (Sentido Común) -- Axtel, la empresa de telecomunicaciones que hasta hace poco negociaba con sus acreedores extender el plazo de sus adeudos por el difícil entorno en el que operaba, ha experimentado un resurgimiento a lo largo de este año que pocos anticipaban.

     La acción de una de las empresas más pequeñas de telecomunicaciones en México ha ganado 90.3% este año, mientras que tan solo en el mes de agosto acumula un alza de 32.3%, lo que le ha permitido cotizarse a su mayor nivel de los últimos cuatro años.

     Tan sólo hoy Axtel registró un avance de 5% para cerrar en 6.71 pesos, el mejor precio en casi cuatro años y medio. La última vez que la acción de la empresa de telecomunicaciones terminó la jornada en un precio más alto, de 6.72 pesos, fue el 3 de marzo de 2011.

     Los motivos de este repunte de la compañía a lo largo de 2015 son dos.

     Por un lado está el cambio regulatorio que se dio luego que el Congreso aprobó el año pasado una reforma a las leyes que regulan las actividades de las telecomunicaciones en México; mientras que por otro, existe una creciente percepción en el mercado que Axtel podría ser adquirida por otra compañía para unir fuerzas y tener más posibilidades de sobrevivir en una industria intensiva en capital y fuertemente competida.

“En el en el sector de telecomunicaciones los operadores siempre están buscando oportunidades de consolidación, porque estas empresas generan economías de escala con cada expansión en su infraestructura”, escribió Homero Ruíz, analista de Signum Research, una empresa dedica al análisis económico y bursátil en México, en un reporte para explicar el alza que han registrado los títulos de Axtel.

Ruíz agregó que la empresa que podría ser la mejor candidata para adquirir a Axtel es Alestra, la filial de telecomunicaciones del segundo grupo industrial más grande de México, Alfa.

Para el analista Axtel tiene varias ventajas que puede hacerla atractiva para otras compañías que quisieran, vía una adquisición, expandir sus operaciones.

“La compañía cuenta con una atractiva red de fibra óptica y de cobre, con la cual puede ofrecer servicios a un gran número de usuarios, misma que podría fortalecer la oferta de servicios de operadores más grandes como Alestra”, concluyó Ruíz.

     A esa ventaja habría que añadir también los cambios al marco regulatorio que hoy permite a las autoridades que supervisan el buen desempeño de la industria, y que están agrupadas en el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), combatir mejor los posibles abusos de empresas de mayor tamaño contra sus rivales menores.

     El cambio en las leyes de telecomunicaciones, por ejemplo, permitió poner fin a una disputa sobre tarifas de interconexión que mantuvo por cerca de una década Axtel con América Móvil, la mayor compañía de telecomunicaciones en América Móvil, en marzo pasado.

     El fin del conflicto eliminó el riesgo de la posible desaparición de Axtel por el impacto financiero que hubiese tenido en su contra si hubiera perdido el pleito legal. Además, con él Axtel recibió un pago en compensación de América Móvil por 950 millones de pesos y firmó un contrato con su antigua némesis para poder utilizar su red a fin de expandir sus servicios de telefonía.

     La sorpresiva disposición de la empresa controlada por Carlos Slim, el segundo hombre de negocios más acaudalado del planeta, por no sólo resolver sus diferencias con Axtel, sino hasta para ayudarla a sobrevivir, fue una consecuencia directa del cambio regulatorio.

     Cómo América Móvil había sido considerada una compañía preponderante por el IFT, comenzó a padecer una regulación asimétrica y mucho más severa que lo nunca antes había experimentado en México.

      Para quitarse esa categoría de preponderante, la empresa de Slim debía, cuando menos bajar, su participación de cerca de 70% en el mercado de la telefonía fija y móvil a menos de 50%. Eso ha hecho que América Móvil tenga una actitud mucho menos abusiva con sus competidores de menor tamaño (Axtel vale hoy poco más de 500 millones de dólares, mientras que América Móvil tiene un valor de capitalización de cerca de 58,000 millones de dólares, o mil veces más) a fin de que éstos puedan ganar mercado y pueda ella al final sacudirse las reglas asimétricas.

"El riesgo financiero de Axtel. . . mejoró después del acuerdo con América Móvil", dijo Adrián de los Santos, director de relaciones con inversionistas y finanzas corporativas de Axtel hace un par de meses a la agencia de noticias Bloomberg.

Claro que si bien, Axtel cuenta con un panorama mucho más favorable hoy que hace un año, los retos para la compañía siguen estando presentes.

Carlos Antonio de Legarreta, analista senior de telecomunicaciones de GBM,  identifica, por ejemplo, dos retos a corto plazo para la empresa, con sede en Monterrey. El primero consiste en invertir para poder crecer su oferta de productos, principalmente para gobiernos y corporativos.

El otro reto, es una circunstancia ajena a la compañía pero que podría golpear sus finanzas: la devaluación reciente del tipo de cambio.

Esa caída de la moneda mexicana frente al dólar ha ya elevado el costo financiero en pesos de la empresa, lo que muy probablemente reduzca sus ganancias pues Axtel, ante la creciente competencia que se vive en la industria difícilmente podrá traducir a precios los mayores desembolsos que tendrá que hacer para pagar su deuda, la cual está en su mayoría denominada en dólares.

De cualquier manera, Legarreta recomienda mantener las acciones de Axtel por la posibilidad de ser adquirida o por lograr una fusión con otra compañía que incrementaría su atractivo, tanto para sus accionistas de control actuales, como para el público inversionista que tiene títulos de la segunda menor empresa de telefonía e internet en México.

Derechos reservados © Cartera, S.A. de C.V. 2015

 


Fecha de publicación: 25/08/2015

Etiquetas: Axtel América Móvil telecomunicaciones industria telefonía internet México