22 de feb. (Sentido Común) -- La economía de México consiguió sobreponerse el año pasado a las amenazas que enfrentó y finalizó con un crecimiento, que si bien fue menor que el de un año antes podría ser envidiado este 2017.

     El producto interno bruto del país creció 2.1% en 2016, medido con cifras ajustadas por estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el órgano de gobierno responsable de recabar la información económica y social en el país.

     Cierto que un año antes la economía avanzó a un ritmo mayor, de 2.6%, pero este progreso no parece despreciable si se toma en cuenta que los recortes presupuestales llevados a cabo por el gobierno para proteger las finanzas y los incrementos a las tasas de interés en el país amenazaban con frenar de manera más importante el dinamismo.

    De hecho, la economía mexicana cerró el año con una nota fuerte al reportar un avance de 0.7% en el cuarto trimestre del año con respecto al tercero, en cifras ajustadas por estacionalidad de Inegi.

     Así el PIB igualó lo que estimaban analistas encuestados por Infosel, que vaticinaban un avance de 0.7% en cifras ajustadas, pero superó el crecimiento de 0.6% reportado de manera preliminar por Inegi hace un par de semanas.

     En términos desagregados, las actividades primarias o agropecuarias disminuyeron 0.3% y tuvieron su primer tropiezo del año. Por su parte, las actividades industriales se aceleraron 0.2% y las actividades terciarias o de servicios desaceleración el paso pero crecieron a un ritmo 0.8% con respecto a los tres meses previos.

     “Los servicios, en conjunto con un mejor desempeño de la industria, dieron soporte a un sólido desempeño del cuarto trimestre”, escribió Pedro Uriz, analista con el área de Global Research Markets con BBVA Bancomer, en un reporte. “Hacia adelante la incertidumbre está afectando las expectativas de PIB de 2017, pero los datos duros siguen mandando señales mixtas”.

     En términos anuales, o si se compara el avance del PIB los últimos tres meses del año pasado con respecto al último trimestre de 2015, entonces la economía del país creció 2.4%, superando el 2.2% esperado por el consenso de analistas encuestados por Infosel.

    Nuevamente, el sector con menor crecimiento fue el industrial con un crecimiento nulo, aunque este resultado está muy afectado por el bajo rendimiento de las actividades vinculadas a la minería, principalmente en las actividades petroleras.

     De hecho, las actividades manufactureras del país avanzaron 1.9% con respecto a los últimos tres meses del año anterior, su mayor avance de 2016 e idéntico al reportado el cuarto trimestre de 2015 frente al mismo de 2014.

     Los servicios también mostraron signos de desaceleración en términos anuales al crecer 3.3% y las primarias avanzaron 6.6%.

    De acuerdo con analistas, este crecimiento difícilmente se sostendrá durante 2017. “Las implicación es que habrá desafíos en 2017 por la nueva configuración de la relación comercial México-Estados Unidos y una posible moderación del consumo, que ocasionarán que el PIB se expanda 1.6%”, dijo Mariana Ramírez, la analista de casa de bolsa Ve por Más, en entrevista telefónica.

     La última encuesta elaborada por Citibanamex, la filial mexicana del banco Citigroup, revela que los especialistas del sector privado prevén que la economía mexicana crezca a un ritmo de 1.5% en este año.

     El principal riesgo para la economía mexicana, coinciden varios, es la falta de certeza sobre el futuro de la relación comercial con Estados Unidos con la llegada a la presidencia de ese país de Donald J. Trump.

     “Creemos que por Trump, las inversiones en México podrían empezar a frenarse” debido principalmente a la incertidumbre para el mercado, dijo Armando Rodríguez, analista de la consultoría financiera Signum Research, en una entrevista telefónica. “Eso rezaga muchos proyectos que pudieran tener en puerta desde 2016 [las empresas] y afecta mucho al crecimiento”.

     Desde que Trump era candidato presidencial reveló sus intenciones de renegociar algunos aspectos del tratado de libre comercio que Estados Unidos tiene desde hace más de dos décadas con México y Canadá, en busca de concesiones que sean favorables para los trabajadores de su país.

     De lo contrario, buscará la cancelación de ese acuerdo que es responsable de la integración comercial de la región y que explica porqué alrededor de 80% de las exportaciones manufactureras mexicanas tienen como destino el país vecino del norte.

     “No descartamos que un cambio estructural de las relaciones comerciales generado por la posible modificación del Tratado de Libre Comercio tenga un impacto negativo sobre la economía”, escribió por su parte Joan Enric Domene, analista económico de Invex, en un reporte.

     Otros factores internos que también pueden menoscabar la economía mexicana incluyen una probable desaceleración del consumo privado, sustentada en una caída histórica de la confianza del consumidor durante el mes de enero.

     “El primer impacto sobre el crecimiento vendrá en la primera mitad del 2017, siendo el canal de transmisión un fuerte deterioro de los niveles de confianza empresarial y del consumidor”, dijeron analistas del banco mexicano Banorte Ixe, en un reporte. “Es probable que la percepción negativa de Donald Trump se desvanezca poco a poco y la confianza repunte hacía la segunda mitad del año”.

     

 

 

 

 

 

 

 


Fecha de publicación: 22/02/2017

Etiquetas: México economía PIB crecimiento 2016