16 de mar. (Sentido Común) -- Cemex, la productora de cemento más grande de América, actualizó sus objetivos de reducción de deuda y desinversión de activos no estratégicos para el periodo 2016-2017 luego de haber avanzado más de lo planeado el año pasado.

     La compañía, cuyo principal objetivo es recuperar el grado de inversión que perdió hace ya más de ocho años, mejoró su meta de venta de activos de un rango de entre mil 500 y dos mil millones de dólares a otro de dos mil 500 millones.

     La empresa, con sede en Monterrey, hizo la revisión a la alza de esa cifra luego de haber logrado desprenderse de dos mil millones de bienes tan solo en 2016, de acuerdo con la presentación que hizo Cemex a inversionistas y analistas en el llamado Cemex Day.

     Ello significa que durante 2017 Cemex espera vender al menos 500 millones de dólares adicionales de activos sobre el mejor estimado que tenía hasta ahora.

     Desde 2016, las medidas para desprenderse de partes de sus activos para hacerse más rentable, han incluido, entro otros, las operaciones en Bangladesh y Tailandia por 53 millones de dólares y la venta de su negocio de tubos de concreto reforzado en Estados Unidos a Quikrete Holdings por 500 millones.

     Además, Cemex vendió el año pasado por 306 millones de dólares algunos activos que tenía en Estados Unidos al también productor de materiales mexicano, Grupo Cementos Chihuahua (GCC) y acordó enajenar por 80 millones de dólares diversos activos de bombeo de concreto premezclado que tenía en México a la empresa española Pumping Team.

     A inicios de este año, Cemex concluyó además la venta por 400 millones de dólares de otros activos estadounidenses, ubicados en el estado de Ohio, a la compañía Eagle Materials.

     Hace unos días, la empresa cementera concretó la venta de un interés de 13.5% en GCC a diversos inversionistas a través de una oferta pública. Por esa transacción, Cemex recibió cerca de 218 millones de dólares.

     Cemex también elevó en su día con sus inversionistas y analistas su pronóstico de reducción de deuda, que está casi en su totalidad --99%-- denominada en monedas extranjeras (78% de ella en dólares), de un rango de entre tres mil y tres mil 500 millones de dólares a otro mayor, de entre tres mil 500 y cuatro mil millones.

     Para ello, Cemex dijo que aprovechará la opción que le ofrecen algunos endeudamientos para realizar compras anticipadas de los mismos, más cuando en los próximos 10 meses dos mil 300 millones de dólares de sus obligaciones financieras caerán en esa posibilidad. 

     Para los analistas, las metas planteadas por Cemex son viables y posicionan bien a la empresa para mejorar su perfil crediticio y seguir avanzando con su meta de recuperar el grado de inversión.

     “Consideramos que la situación actual de Cemex y lo anunciado en cuanto a expectativas favorables para continuar con el camino a recuperar su grado de inversión, confirman nuestra visión positiva para la empresa”, escribió José Espitia, especialista de la casa de bolsa de Banorte Ixe, en un reporte sobre los anuncios que hizo la cementera.

     El analista tiene actualmente una recomendación de ‘compra’ sobre las acciones de la compañía, pues prevé que este año sus títulos cierren con un rendimiento superior a 20%.

     La productora de materiales, con sede en Monterrey, pagó durante 2016 dos mil 254 millones de dólares de sus pasivos y concluyó el año con una deuda total de 13 mil 73 millones, 14.7% menor a la registrada al cierre de 2015.

     Así, el apalancamiento de la compañía --o el nivel de su deuda total como proporción del flujo de operación-- concluyó 2016 en 4.7 veces, o menos del nivel de 5.5 en el que estaba ese indicador hace tres años o de las 7.7 veces en que se ubicaba en 2010.

     De hecho el nivel actual de apalancamiento de Cemex, cuyo objetivo en el mediano plazo es que sea de 3 veces, es el más bajo desde 2006.

     Esto le ha permitido avanzar en su principal meta luego de que perdió el grado de inversión por el sobreendeudamiento que tenía y por el desplome económico de México, Estados Unidos y España, sus principales mercados, por la crisis económica internacional de 2008-2009.

     En enero, Standard & Poors, una de las principales calificadoras a nivel mundial, subió la nota de Cemex de ‘B+’ a ‘BB-’, o del cuarto al tercer nivel todavía en grado especulativo, según la escala de la agencia.

     “Consideramos que el anuncio de la empresa de la venta de activos y las expectativas de generación de flujo de efectivo respaldan su esfuerzo por reducir su apalancamiento”, escribieron en ese momento Luis Manuel Martínez y Alexandre Michel, analistas de Standard & Poors.

     Fitch Ratings, otra de las grandes evaluadoras de riesgo crediticio mundial, tiene asignada una calificación a Cemex de ‘BB-’, que, al igual que la de S&P, se encuentra a tres escaños de distancia de la categoría de grado de inversión.

     Cemex espera lograr sus metas en un escenario donde la economía mexicana crecería 1.8% en 2017 y 2.2% en 2018 y cuya demanda de cemento se mantendría creciendo entre 2 y 5% en los próximos cinco años.

     La firma espera que la demanda de este material crezca en el mismo periodo a un ritmo mayor a 5% en mercados como Filipinas, Vietnam, India y España.

     La empresa también estima que su estrategia de precios impulse sus ingresos en 550 millones de dólares este año, mientras que estima que el margen sobre su flujo de operación se mantenga por encima de 20%, o de sus mejores niveles desde 2007.

     La compañía también ve este año con “cauteloso optimismo”, pues espera un impacto positivo de la política expansiva y planes de infraestructura de Estados Unidos, su principal mercado, que podría incrementar la demanda por su cemento en ese país de entre 4 y 6%; de la buena demanda en México que impulse el sector residencial; del mayor gasto en infraestructura en sus principales mercados europeos y por una mayor apreciación del dólar, concluyó Cemex.





Fecha de publicación: 16/03/2017

Etiquetas: Cemex materiales deuda México venta activos objetivos