27 de mar. (Sentido Común) -- Los economistas del sector privado mantuvieron su pronóstico que Banco de México subirá un cuarto de punto porcentual su tasa de interés de referencia el 30 de marzo cuando la junta de gobierno de ese Instituto Central se reúna por segunda ocasión en el año a pesar de una mayor inflación a la esperada en la primera quincena de marzo.

     Lo anterior, en sintonía con el movimiento que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) aplicó hace un par de semanas a sus propios tipos de interés de referencia.

     Los especialistas así estiman que Banco de México elevará en 25 puntos base su tasa, de 6.25 a 6.5%, con la intención de mantener el diferencial de tasas de interés con Estados Unidos y desalentar que los inversionistas foráneos retiren capitales del país en busca de mejores rendimientos en otros mercados.

     De los 11 grupos de análisis consultados por la agencia de noticias Infosel, tres consideran que podría haber un incremento de medio punto porcentual y dos creen que las tasas permanecerán sin cambio.

     Los seis coinciden en que los hacedores de la política monetaria decidirán subir un cuarto de punto porcentual la tasa de referencia para acumular un aumento de 3.5 puntos porcentuales desde que el banco central inició el actual ciclo de endurecimiento monetario en diciembre de 2015.

     Ese pronóstico es igual al que esperaban los analistas a principios de la semana pasada, antes que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía revelara que los precios en la primera quincena de marzo subieron 0.35%, hasta ubicarse en una tasa interanual de 5.29%, la mayor desde mediados de 2009.

     Sin embargo, en esta ocasión la inflación estuvo en mayor medida impulsada por los precios de bienes volátiles, en particular los agropecuarios, que ascendieron 1.4%. Además, si bien aún reflejó el traspaso del tipo de cambio en los precios de mercancías y servicios, este fenómeno ocurrió en menor medida que en meses anteriores.

     De ahí que la mediana de los analistas encuestados por Infosel estimó que el banco central seguiría con una política monetaria restrictiva, pero con un incremento de tasas menos agresivo al que ha mostrado en meses anteriores. Las últimas seis ocasiones que el Instituto Central subió sus tasas lo hizo a un ritmo de medio punto porcentual en cada una.

     De ahí que algunos piensan que el banco central ya hizo parte de su trabajo para evitar un mayor deterioro de las expectativas de inflación.

     Consideramos que “Banxico ya no tendría la necesidad de ajustar su política monetaria de manera estricta”, dijo Alejandro Cervantes, economista del banco Banorte-Ixe, en una entrevista telefónica. “Después de como se ha comportado el tipo de cambio” modificamos nuestro pronóstico de alza de tasas frente a principio de año de 0.5 a 0.25 puntos porcentuales.

     Incluso, si el tipo de cambio se mantiene en niveles similares a los actuales y los precios de las gasolinas no muestran incrementos significativos, Banxico, como también se conoce al banco central mexicano, movería su tasa de referencia solo en línea con la Fed, por lo que Banorte espera otras tres alzas adicionales a la de esta semana.

     Funcionarios de la Fed han dicho que estiman dos alzas más este año, aunque algunos analistas pronostican que podrían ser tres, según cómo evolucione la economía del país vecino del norte con la llegada del nuevo gobierno.

     Claro que existen argumentos para pensar que Banxico podría no subir las tasas de interés.

     Por un lado, para algunos, la tasa de referencia se encuentra cerca de niveles que restringirían el crecimiento del país, mientras que por el otro, las expectativas inflacionarias de mediano y largo plazo, aunque han aumentado, aún se encuentran bien ancladas, escribió Benito Berber, el analista de la institución financiera Nomura, en un documento.

     Además, el repunte de las exportaciones manufactureras podría compensar la desaceleración del consumo interno y así mantener hasta cierto punto el crecimiento económico de México.

     “Ahorren sus balas. Si las cosas van bien para Banxico ¿por qué ‘desperdiciar’ alzas de tasas ahora?”, escribió Berber, economista de Nomura. “Si no está roto, ¿por qué arreglarlo?”

     Por otra parte, para muchos analistas y para el banco central mexicano, la moneda nacional se encuentra subvaluada y cotiza por arriba de los niveles que corresponden de acuerdo con la estructura económica del país.

     Así, aun con la reciente apreciación, muchos consideran que el tipo de cambio sigue reflejando el efecto de la victoria de Donald J. Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.

     De hecho, la moneda nacional se ubica en un nivel más fuerte con respecto al que registró en la tarde del 8 de noviembre, cuando muchos aún consideraban que Hillary Clinton tenía más posibilidades de ganar las elecciones.

     Hoy, la divisa nacional cotiza alrededor de los 18.9 pesos por dólar.

     “El nivel acorde con los fundamentales [de la economía] debería ser menor a 18.5” pesos por dólar, escribió Guillermo Aboumrad, director de estrategias de mercado de Finamex Casa de Bolsa, en un reporte. “Al día de hoy el tipo de cambio sin efecto Trump podría pensarse entre 17.8-18 pesos por dólar”.

     Aboumrad agregó que aún es muy temprano para considerar que el efecto de Trump desaparecerá para pensar que el tipo de cambio caerá a niveles inferiores a los 18 pesos, ya que el plan fiscal que presentará este verano podría hacer más atractiva la inversión en Estados Unidos y así el peso se deterioraría. “Todavía es muy temprano para cantar victoria”.

 

 


Fecha de publicación: 27/03/2017

Etiquetas: Banxico tasas interés economía México dólar peso