Un vistazo a las gasolineras del mañana

13 de jun. (Dow Jones) -- Las gasolineras están a punto de ser objeto de una drástica remodelación.

Las grandes compañías petroleras del mundo tienen todo tipo de cambios potenciales en el restirador, incluyendo nuevas opciones de combustible, restaurantes y tiendas, y servicios de entrega de paquetería.

Algunas están experimentando con aplicaciones móviles para acelerar el proceso de reabastecimiento de combustible, o probando servicios que pasan por alto totalmente las gasolineras y entregan combustible directamente a los consumidores, o buscando maneras en que el cambio por parte de los consumidores a recurrir a los vehículos que se comparten o a los vehículos autónomos podría crear oportunidades para que las petroleras operen flotas de automóviles.

Todo esto forma parte de los esfuerzos de las petroleras para adaptarse a los cambiantes hábitos del consumidor y las nuevas tecnologías que amenazan con cambiar el negocio de venta de gasolina.

De acuerdo con un informe publicado el año pasado por la consultora Wood Mackenzie, es probable que los coches eléctricos reduzcan la demanda de gasolina en Estados Unidos en 5% --y posiblemente hasta en 20 %-- para 2035. Se espera que la mejor eficiencia en el consumo del combustible genere un impacto aún mayor. Los vehículos automatizados y la difusión del uso compartido de automóviles también podrían cambiar fundamentalmente el mercado a largo plazo.

La mayoría de las grandes compañías petroleras se han mostrado escépticas con respecto al impacto que tendrán los coches eléctricos en el consumo de combustible. Sin embargo, algunas ya están experimentando con los servicios que pueden prestar a los vehículos eléctricos y de gasolina en ciertos mercados, así como suministrar otros combustibles. También están viendo una oportunidad para diferenciarse así mismas ofreciendo servicios que van más allá del reabastecimiento de combustibles o de la recarga.

Durante los próximos 12 a 18 meses, Royal Dutch Shell llevará a cabo una serie de experimentos alrededor del mundo para ayudar a determinar la mejor manera de adaptar sus gasolineras. Una de las áreas de estudio está en posibilidades de proporcionar acceso a combustibles alternativos como el hidrógeno, gas natural licuado (GNL) y cargadores eléctricos en estaciones de abastecimiento. Shell ha abierto cinco estaciones de abastecimiento de GNL para camiones a lo largo del sistema de autopistas interestatales estadounidenses y cuatro en Países Bajos.  La empresa está a punto de comenzar a ofrecer un servicio de carga rápida para coches eléctricos en las gasolineras de Reino Unido y de Países Bajos.

Otros tienen esfuerzos similares en curso. BP tiene 50 sitios en todo el mundo con carga eléctrica. La francesa Total tiene previsto instalar 300 estaciones de carga en toda Europa y 400 puntos de abastecimiento de hidrógeno en toda Alemania para 2023. En los próximos cinco años, Total planea construir 350 estaciones de gas natural en Europa. El mes pasado, adquirió el tercer mayor proveedor europeo de gas natural para vehículos, añadiendo 100 estaciones de gas natural a su cartera.

Exxon Mobil, que ha revertido su estrategia en gran medida a un modelo de concesión de licencias para su red de estaciones de combustible, está buscando desarrollar un nuevo tipo de gasolina para los automóviles más económicos que se espera que lleguen al mercado en los próximos años debido a la regulación más estricta en todo el mundo.

Tiene ingenieros en New Jersey que trabajan en un combustible para turbocompresor que puede darles a los motores eficientes en el consumo de combustible la misma aceleración que los vehículos deportivos-utilitarios que consumen mucha gasolina.

Aunque muchas de las principales compañías petroleras redujeron su propiedad de estaciones minoristas en los últimos años, presionadas por los débiles márgenes de ganancias y la competencia, sus divisiones de refinación y minoristas de gasolina demostraron su valía cuando los precios del petróleo cayeron en 2014, ayudando a amortiguar el lastre financiero que experimentaron sus negocios de exploración y producción.

Es por eso que algunas grandes petroleras están abriendo nuevas estaciones y mejorando los sitios existentes, revisando oportunidades en los mercados emergentes donde la demanda de combustible está aumentando y luchando por diferenciarse en un entorno cada vez más competitivo.

BP planea abrir 200 estaciones minoristas en México este año y ha obtenido una licencia para abrir hasta tres mil 500 en la India. La compañía se encuentra en medio de un acuerdo con valor de mil 300 millones de dólares para adquirir el negocio de combustibles de la cadena de supermercados Woolworths en Australia. Eso le añadiría 527 gasolineras, ubicadas cerca de los mercados Woolworths, a los negocios de BP en el país. BP ha tenido éxito en otras partes en unirse a marcas bien establecidas. En Reino Unido, por ejemplo, muchas gasolineras de BP tienen puntos de venta de la minorista Marks & Spencer.

“Hace quince años sólo era combustible”, dijo Alex Jensen, vicepresidente de la división minorista de BP en Europa. Ahora, en Estados Unidos, la mitad de los clientes de BP ni siquiera cargan gasolina cuando visitan una gasolinera, sino que simplemente vienen a comprar comida, agregó.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo