20 de jul. (Dow Jones) -- La reforma del sistema educativo mexicano que estableció la evaluación de los maestros ha crecido en aceptación entre ellos, un paso que podría mejorar el aprendizaje y las oportunidades para los estudiantes del sur más pobre de la nación, dijo el secretario de educación del país.

El gobierno ha evaluado a 96% de los maestros en Chiapas, Michoacán y Oaxaca, tres estados en los que la resistencia es más marcada, dijo Aurelio Nuño. El gobierno del presidente Enrique Pena Nieto se ha enfocado ahora a mejorar los edificios escolares y revisar el plan de estudios, incluyendo ponerle un mayor énfasis al aprendizaje del idioma inglés, dijo.

La revisión ha enfrentado resistencia por parte de los maestros del sindicato Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) tras su aprobación poco después de la toma de posesión de Peña Nieto en 2012.

Los maestros viajaban frecuentemente a la Ciudad de México para protestar, además un enfrentamiento entre manifestantes y la policía en Oaxaca el año pasado provocó la muerte de por lo menos ocho personas.

En parte, estos cambios tratan de basar la contratación y promoción docente en los méritos, poniendo fin a la práctica de los educadores de vender sus plazas laborales al mejor postor cuando se retiraban y evitar el despido por falta de capacidad.

“Es evidente que aún no hemos superado todo, sigue habiendo cierta resistencia”, dijo Nuño, de 39 años, en una entrevista. “Pero el avance es evidente, está presente, y eso es algo que nos hace muy felices y que nos anima”.

 

Preparación global

Más allá de las evaluaciones de los maestros, la reforma busca llevar a las escuelas públicas de la nación de un sistema basado en la memorización a otro en el que los niños aprenden de manera activa, dijo Nuño.

El gobierno tiene como meta que todos los estudiantes hablen inglés y español dentro de 20 años, preparándolos mejor para competir globalmente y reducir la brecha de oportunidades con relación a los que asisten a escuelas privadas bilingües y que ganen más como adultos que aquellos que se basan en la educación pública monolingüe.

Nuño es considerado como uno de los candidatos potenciales para obtener la nominación presidencial del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) previo a la elección nacional del próximo mes de julio. Se desempeñó como jefe de gabinete durante los primeros años del gobierno de Peña Nieto, ayudando a negociar el Pacto por México que incluyó las reformas educativa y de telecomunicaciones. Nuño fue nominado para convertirse en secretario de Educación hace dos años.

Cuando se le preguntó si será candidato, Nuño minimizó sus aspiraciones políticas, señalando el “gran reto” que implica la reforma de la educación. “Estoy convencido de que esta es la mayor transformación que enfrentará México en el futuro”.

 

Obstáculos

En las encuestas, Nuño está al mismo nivel de preferencias que José Antonio Meade, el secretario de Hacienda, quien también puede estar en la reducida lista del PRI, en la encuesta más reciente publicada por El Financiero hace unas semanas.

Miguel Ángel Osorio, el secretario de Gobernación, fue el mejor situado en las preferencias entre los potenciales candidatos del PRI cuando se comparan con los aspirantes presidenciales de otros partidos con 24% de apoyo. Luis Videgaray, el secretario de Relaciones Exteriores, obtuvo 18% de las preferencias, teniendo a Nuño y a Meade obteniendo 17%.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo       

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Fecha de publicación: 20/07/2017

Etiquetas: Educación Reforma Educativa Política Nuño Meade Chong