25 de jul. (Sentido Común) -- Las tensiones entre los miembros del gabinete de la administración del presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, parecen no terminar y por el contrario nuevas tensiones alimentan rumores de más cambios en el primer círculo de la Casa Blanca.

       Por la mañana el presidente, de 71 años, lanzó críticas ahora en contra del procurador general, Jeff Sessions, por considerar que actúa con debilidad al no ordenar una investigación contra Hillary Clinton, la candidata del partido demócrata en la elección de noviembre pasado.

     Claro que Trump puede estar molesto porque, a diferencia de su rival, él y varios colaboradores cercanos sí están siendo investigados por los nexos que pudieron tener durante la campaña con personas de origen ruso.

     Un informe de las agencias de inteligencia de Estados Unidos reveló que hubo intentos de un grupo de hackers rusos por intervenir en la elección presidencial para perjudicar a Clinton, por lo que ahora las autoridades indagan cuál fue el resultado de ese esfuerzo y si éste contó con colaboración de personas cercanas al entonces candidato del partido republicano.

     De ahí que el presidente, desde su cuenta personal en la red social Twitter, la cual es uno de sus canales de comunicación favorito por el enfrentamiento que tiene con la prensa, lanzó ataques al procurador por el papel que juega en estas investigaciones.

     “El procurador general Jeff Sessions ha tomado una posición muy débil en los crímenes de Hillary Clinton ([¿]dónde están los correos electrónicos y el servidor del Comité Nacional del Partido Demócrata[?]) y con los filtradores de información de inteligencia”, escribió el también empresario de bienes raíces en su cuenta @realDonaldTrump.

     Su inconformidad ya había sido delatada en una entrevista ofrecida al diario The New York Times, donde criticó la decisión de Sessions de retirarse de las investigaciones sobre la relación de Rusia y el equipo cercano a Trump.

     “Sessions no debió de haberse deslindado” de la investigación, dijo Trump al Times, en esa entrevista que alertó de la molestia del presidente. “Si se iba a retirar debió haberme dicho antes de aceptar el trabajo y yo hubiera elegido a alguien más”.

     La crítica en contra del procurador, a quien nombró el propio presidente, es evidencia de la frustración que tiene Trump por las dificultades que está encontrando para generar consensos, incluso dentro de su equipo o en su propio partido, que le permitan gobernar de manera más fácil.

     Incluso, a menos de 200 días de gestión, ya habido cambios importantes en su primer círculo de colaboradores.

     A inicios de su mandato Michael Flynn, un militar retirado que asesoraba al presidente en temas de seguridad, anunció su renuncia tras  reconocer que se reunión con personas de origen ruso sin avisar debidamente a la presidencia.

     Además Mike Rubke, el exdirector de comunicaciones, también dejó su cargo a solo tres meses en el puesto y fue sustituido el viernes pasado por Anthony Scaramucci.

     No obstante, la llegada de Scaramucci ocasionó la renuncia de Sean Spicer, el vocero oficial de la Casa Blanca, quien aparentemente no ve con buenos ojos la llegada del empresario que Trump escogió para dirigir el área de comunicaciones.

     La crítica matutina de Trump, para muchos, parece confirmar que podría remover a Sessions, algo que despertó críticas incluso al interior del partido republicano.

      “El tuit del presidente Trump sugiriendo al procurador general que investigue a un exrival político es altamente inapropiado”, escribió el senador Lindsey Graham, del estado de Carolina del Sur, en un mensaje a través de su cuenta personal en Twitter. “Las decisiones de la Fiscalía deben basarse en la aplicación de hechos a la ley sin motivación política. Hacer lo contrario es separarse de la tradición estadounidense de separar la ley de la política, independientemente del partido”.

    Al respecto, el líder del Congreso y representante de Winsconsin por el partido republicano, Paul Ryan, únicamente dijo que es prerrogativa del presidente decidir a quién se contrata o se despide en la rama Ejecutiva del gobierno.

       “Es decisión del presidente decidir sobre su personal y de cualquier seguimiento a esa decisión”, dijo Ryan a medios, de acuerdo con un reporte de Reuters, al ser cuestionado sobre un posible reemplazo en la procuraduría general del país. “Si tiene preocupaciones con cualquiera en su administración de cómo se conduce en su trabajo estoy seguro que lo discutirá con ellos directamente”. 

      Sobre el despido de Sessions, un reporte del portal de noticias estadounidense Axios incluso dijo que el presidente ya estaría considerando sustituir al procurador Sessions por Rudolph Giuliani, el exalcalde de Nueva York que apoyó a la campaña del partido republicano.

     Giuliani dijo a la cadena de noticias estadounidense CNN que el reporte es falso y reiteró su apoyo a Sessions quien, desde su punto de vista, “tomó la decisión correcta de acuerdo a las reglas del Departamento de Justicia” al separarse de la investigación por vínculos rusos.

     El último de los rumores involucra a Rex Tillerson, el secretario de Estado de 62 años, quien aparentemente estaría considerando dejar su puesto por la frustración que la dirección del presidente Trump y la coyuntura política han significado para sus funciones.

     “Dos fuentes que hablaron en condición de anonimato dicen que no se sorprendería si existiera una salida de Rex” antes de finales de año, reportó CNN Politics, el área de política de esa cadena de noticias. “Ambos dijeron que se nota una creciente frustración en el Secretario y que duda que la confrontación con la Casa Blanca llegue a su fin pronto”.

 

 

 


Fecha de publicación: 25/07/2017

Etiquetas: EUA Trump Sessions investigación Rusia Giuliani