Newsletter
Recibe gratis un resumen diario de lo más importante en negocios.
Al suscribirte aceptas los términos y condiciones de nuestra política de privacidad.
24 de sep. (Sentido Común) -- Desde el sismo del 7 de septiembre en el sureste del país que dejó un centenar de personas muertas y miles de viviendas destrozadas, y ahora con el temblor que dejó un saldo de 400 personas muertas y derrumbó o dejó inservibles cientos o miles de inmuebles en la capital del país, diversos partidos políticos han comenzado a presentar propuestas para donar ciertas porciones de los recursos que reciben del gobierno --tanto de sus presupuestos anuales como de los fondos que usarán para el proceso electoral del próximo año--, en beneficio de los damnificados y para financiar la reconstrucción.
En buena medida, la reacción de los partidos se debió a las sugerencias que han aparecido en las redes sociales de diversos ciudadanos, en el sentido de que el país ganaría más si ese dinero se destinara a pagar la reconstrucción de viviendas, hospitales y escuelas, que en financiar a los partidos y sus compañas políticas.
Las propuestas hablan de que los fondos deben donarlos los institutos políticos a las ciudades dañadas por los movimientos telúricos en los estados de Oaxaca, Chiapas, Morelos, Estado de México, Tlaxcala y Puebla, así como para la capital del país.
El primero que reaccionó a esas propuestas fue Andrés Manuel López Obrador, líder del partido Movimiento de Regeneración Nacional, o Morena.
En un inicio, él propuso donar 20% de los recursos que recibirá del Instituto Nacional Electoral (INE), el organismo encargado de organizar los procesos electorales en México, para las campañas del próximo año. El jueves pasado, sin embargo, dijo que propondrá al Consejo Nacional de su partido subir ese porcentaje a 50%.
Claro que López Obrador quiere que sea Morena la que reparta esa ayuda monetaria, lo que no convence a muchos pues podría seguir aprovechando esos recursos para su propio proselitismo político, más cuando él contenderá el próximo año por la presidencia de la república --su tercer intento por convertirse en el primer mandatario de México.
Posteriormente a la sugerencia del líder de Morena, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que está en el poder, propuso donar 258 millones de pesos (14.5 millones de dólares), o 25% de su presupuesto anual, en apoyo a la reconstrucción y los damnificados de los sismos.
“Ante la tragedia que ha afectado a nuestro país por los sismos ocurridos el 7 y el 19 de septiembre, el PRI renuncia de inmediato al 25% de su financiamiento público anual”, dijo ese Instituto Político, en un comunicado. “Es una acción en solidaridad con el pueblo de Chiapas, Oaxaca, Ciudad de México, Estado de México, Guerrero, Morelos, Puebla y Tlaxcala”.
Hoy, el PRI dijo que el lunes formalizará su oferta ante el INE e invitó a los demás partidos políticos a hacer lo mismo para que entre todos donen casi mil millones de pesos (56 millones de dólares).
La propuesta del PRI incluye la creación, por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, de un fideicomiso, llamado Fuerza México, para que a través de él se canalicen los recursos de forma transparente e íntegra y no sean mal usados por nadie con fines proselitistas.
A la propuesta del PRI y López Obrador, se agregó la que hicieran los tres partidos de oposición que conforman el Frente Ciudadano por México (FCpM) --Partico Acción Nacional (PAN), Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC). Esos institutos propusieron cancelar ya en su totalidad el financiamiento público a los partidos y en su lugar usar esos fondos para los damnificados y las labores de reconstrucción.
“Hemos escuchado a los ciudadanos y tienen toda la razón. El dinero de los partidos políticos debe destinarse al 100% para ayudar a las personas afectadas”, dijo Ricardo Anaya, presidente del PAN, en el video que grabaron los líderes de los tres partidos que conformaron hace unas semanas el FCpM para anunciar su propuesta.
Para los tres partidos, terminar con ese financiamiento acabaría con el dispendio que en ocasiones hacen los institutos políticos de los recursos públicos y que ha enfurecido a la ciudadanía.
Hay que “eliminar al 100% el financiamiento público a todos los partidos”, dijo Dante Delgado, líder de MC, en el video. “El dinero no debe provenir de los impuestos que paga la gente, debe provenir de las aportaciones voluntarias de nuestros militantes y simpatizantes”.
La decisión de que el Estado financiara las actividades de los partidos políticos y sus campañas la tomó el Congreso a propuesta del presidente Ernesto Zedillo hace más de dos décadas. El presidente Zedillo temía en aquel entonces que sin el dinero público los partidos optarán por recibir dineros de dudosa procedencia o de grupos criminales, como los cárteles de la droga.
Esa preocupación perdura, aunque probablemente podrían establecerse mecanismos de control por parte del INE para revisar la procedencia de los recursos privados en las campañas electorales antes de que estos pudiesen ser usados por los partidos políticos.
“Basta de campañas tan costosas en un país con tantas necesidades”, agregó Alejandra Barrales, presidenta del PRD en el mismo video.
El FCpM también propuso que ante la necesidad de destinar recursos para ayudar a quienes están sin hogar en las zonas siniestradas y para la reconstrucción, el gobierno debe iniciar un verdadero programa de austeridad, que incluya la eliminación de todos los seguros de gastos médicos de los altos funcionarios gubernamentales.
“Si quieren ir a un hospital privado que lo paguen con su dinero no con el de la gente”, agregó Barrales, indicando que también el FCpM propone además eliminar los viáticos y los gastos de celulares y gasolina en que incurren los altos funcionarios; así como los gastos de publicidad gubernamental, salvo los relacionados con salud, turismo y protección civil.
No es claro aún, cuál o cuáles de todas estas propuestas perdurarán o serán aprobadas por los partidos, y a las que se añade también la que hicieron 12 senadores del PAN en días pasados a favor de recortar en 85% el financiamiento a los partidos y en 50% los gastos de campaña.
Los senadores panistas estiman que su propuesta ahorraría cinco mil millones de pesos (280 millones de dólares), fondos que podrían destinarse a los damnificados y la reconstrucción.
Fecha de publicación: 22/09/2017
Etiquetas: México economía sismo temblor reconstrucción Chiapas Oaxaca Puebla Morelos Estado de Ciudad