TLCAN no podrá modernizarse este año, cuatro opciones

5 de ene. (Sentido Común) -- La oportunidad para concluir la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) este año parece haber quedado atrás e incluso las mesas de negociaciones permanentes que estaban instaladas en Washington, D.C., finalizaron para dar entrada a una fase de consultas remotas, dijo Moisés Kalach, uno de los empresarios que asesoran al gobierno mexicano en este proceso.

     Los negociadores técnicos de Canadá, Estados Unidos y México hicieron el mayor esfuerzo por llegar a un acuerdo este año, con la intención que el nuevo TLCAN fuera ratificado por las administraciones actuales.

     México está en vísperas de celebrar elecciones para elegir al presidente y la composición de ambas cámaras del poder legislativo. Estados Unidos, por su parte, tendrá que acudir a las urnas en noviembre para renovar a los integrantes de la Cámara de Representantes.

     De ahí que muchos veían crucial que la negociación concluyera antes que esos eventos comenzaran a complicar un proceso que por sí mismo ya es bastante complejo.

     Ahora, sin embargo, esa opción parece haberse cancelado, pues los tiempos que la ley de Estados Unidos marca para la discusión no permiten que el acuerdo sea ratificado antes de mediados de diciembre, cuando concluye la conformación actual del congreso.

     Así, el proceso ahora entrará en una fase menos intensa, en la que las charlas continuarán de manera remota con vistas a concluir ese proceso el año que entra, pese a que buena parte de los trabajos están muy avanzados.

     “Hay 15 capítulos que tenemos, esos son la modernización del tratado”, dijo Kalach Mizrahi, quien es jefe para las negociaciones del TLCAN para el sector privado en México, en un foro organizado por la Cámara Española de Comercio, en Ciudad de México. “No todo es la regla de origen, hay más de la mitad de capítulos cerrados, desafortunadamente esperamos destrabar esto en algún momento y sí es un tema de largo plazo”.

     Hasta ahora los equipos negociadores han logrado finalizar nueve capítulos de los 30 que incluirá el nuevo texto, así como seis de los 10 anexos técnicos que implica el proceso de modernización del TLCAN.

     Ese proceso no ha tenido el progreso que muchos esperaban, en buena medida porque algunas de las propuestas que puso sobre la mesa el gobierno de Donald J. Trump han sido rechazadas por los gobiernos de Canadá y México.

     En particular, dos temas acabaron por enfriar la posibilidad de sacar adelante pronto esa negociación: la cláusula de muerte súbita (sunset clause) cada cinco años y la imposición de aranceles de 15% a las compras de acero y 20% a las aluminio provenientes de Canadá y México.

     “No vamos a firmar eso porque alguien tenga su calendario político y [la sunset] es una clausula de mala fe. Es dejar lo que da un tratado: seguridad, certidumbre, protección. Sí creemos que es una clausula que destruye gran parte de lo que te da el tratado”, dijo Kalach, en la conferencia donde comentó el estado de la negociación. “Íbamos todo relativamente bien [en la negociación] hasta que no aceptamos las condiciones que acabamos de ver y por eso entramos en esta guerra comercial. Estados Unidos está abriendo muchos frentes”.

     El empresario que encabeza los trabajos del llamado ‘cuarto de junto’ dijo que los temas en que no ha podido cerrarse la brecha de visiones entre los tres países, además de la sunset clause, son: la regla de origen de la industria automotriz, los mecanismos de resolución de controversias y la estacionalidad para la importación de frutas y verduras.

    De ahí que Kalach estimó que hay cuatro posibilidades en el futuro del proceso de negociaciones del TLCAN.

      En primer lugar, los tres países podrían seguir en la mesa de negociaciones tal como hasta ahora, en donde Estados Unidos está bajo la protección del Trade Promotion Authority (TPA), la llamada vía ‘fast tack’, o el permiso temporal que tiene la Casa Blanca para aprobar el nuevo texto y presentarlo al Congreso solo para su aprobación, sin modificaciones.  

     Otra opción que está en el horizonte es firmar un ‘skinny’ TLCAN como se conoce a la opción que muchos sugieren de firmar un acuerdo que deje de lado por ahora los temas disputados y no implique cambios legislativos en Estados Unidios para no pasarlo por el Congreso. Esa posibilidad se ha discutido, pero hasta ahora no ha sido presentada de manera oficial por el gobierno estadounidense.

     Una tercera opción es que los tres socios firmen un TLCAN ‘zombie’, que se define como un acuerdo que se renueve sin modificación, con la intención de preservar el espíritu del acuerdo pero que no resuelva las disputas que tienen los tres países.

     Finalmente, aunque es poco probable, Kalach no descartó que Trump anuncie la salida de su país del acuerdo. El mandatario estadounidense, que tiene 71 años de edad, ha amenazado en reiteradas ocasiones con abandonar el tratado si no consigue un acuerdo que considere más benevolente para sus intereses.

     El empresario que encabeza el ‘cuarto de junto’ dijo que México tiene planes para cualquiera de esos escenarios, pues su principal objetivo es mantener al país abierto al libre comercio pese al deterioro de la relación bilateral con su socio comercial más importante.

     “Estamos en un momento difícil de la relación bilateral. No somos los que nos metimos en este ring pero estamos siendo responsables y defendiendo nuestros intereses solo que se puso un poco más difícil de lo que estaba antes”, añadió Kalach a reporteros, a la salida del evento con empresarios españoles en la capital del país. “Puede haber altibajos pero nosotros en el sector privado creemos que debemos seguir con el plan  [del libre comercio]. Queremos el acuerdo correcto, no importa cuál es el camino”.

     Algunos analistas coinciden en que la siguiente ventana de oportunidad podría llegar a inicios del próximo año, cuando México haya concluido el proceso de cambio de gobierno y forme un nuevo equipo negociador, al tiempo que Estados Unidos tenga un nuevo congreso constituido.

    “Los Estados Unidos se quedaron sin tiempo para tener un TLCAN. . . la siguiente ventana de oportunidad clara es a inicios de 2019”, escribieron los analistas económicos del banco estadounidense Bank of America Merrill Lynch, en un reporte. “Esperamos que los países continúen con las negociaciones por un largo tiempo, sin grandes anuncios pero sí muchas posturas”.