Reino Unido reconoce estancamiento en negociación Brexit

21 de sep. (Sentido Común) -- El proceso para que el Reino Unido logre separarse de la Unión Europea parece estar en un momento crítico, debido a las diferentes posiciones que existen sobre el futuro de la relación de los británicos con el bloque europeo, y ahora algunos dudan si será posible llegar a un acuerdo antes de marzo del año próximo, cuando expira el plazo para concretar el divorcio.

     Theresa May, la primera ministra de Reino Unido, dijo que las negociaciones con la Unión Europea sobre el ‘Brexit’ -- como se conoce a la separación británica del bloque común, por el acrónimo en inglés que forman las palabras británico y salida-- están estancadas pues el bloque económico demanda concesiones que son inaceptables para su país, por lo que no descarta dejar la Comunidad Europea sin un acuerdo.

     La ministra británica habló tras la reunión que sostuvieron ayer los líderes europeos en la ciudad de Salzburgo, Austria, donde rechazaron la más reciente propuesta de Londres.

     “Tenemos que hacer frente al hecho de que, a pesar de los progresos, hay dos temas en los que seguimos separados. . .ayer dijeron que la propuesta [que hice] minaría el mercado común. No dijeron cómo ni hicieron otra propuesta así que ahora estamos estancados”, dijo May, en un discurso a su nación. “A estas alturas, no es aceptable simplemente rechazar la propuesta del otro sin detalles o contrapropuestas. . . mientras tanto debemos y continuaremos preparándonos para no tener un acuerdo”.

     Las negociaciones del ‘Brexit’ iniciaron en junio de 2017 y se esperaba que para finales de este año existiera un acuerdo común para delimitar la situación jurídica del Reino Unido una vez que no perteneciera al bloque europeo, cosa que no ha sucedido.

     De acuerdo con May, quien sustituyó en el cargo a David Cameron justamente para conducir el ‘Brexit’, hay dos temas en los que las pláticas con la Unión Europea no avanzan: el acceso británico al mercado común tras la separación del bloque económico y el manejo de la frontera de Irlanda del Norte, quien quiere seguir perteneciendo a la Unión Europea.

     Los representantes de Europa quieren que Gran Bretaña acepte la política económica de la región para preservar su acceso al mercado común, pero eso le impediría hacer acuerdos de libre comercio y la obligaría a mantener algunas concesiones comerciales para el bloque.

     Esa situación, dijo May, sería inaceptable para el Reino Unido pues sería ‘una burla’ y le ocasionaría fuertes reclamos al interior de su país entre quienes quieren un divorcio total de los europeos.

     En cuanto a  Irlanda del Norte, la Unión Europea propone que ese territorio se mantenga en el bloque común, dividiendo al Reino Unido en temas comerciales y económicos, o que se imponga una ‘frontera dura’ entre Irlanda del Norte e Irlanda, lo que complicaría la relación fronteriza. 

     Para la primera ministra británica, esos escenarios son inaceptables por lo que no descarta que llegue marzo y no haya un acuerdo definitivo.

     “Siempre dije que un mal acuerdo sería peor que no tener acuerdo”, dijo May en su discurso en la oficina del gobierno británico en Londres. “Pero también fui clara en que el mejor resultado sería que el Reino Unido deje la Unión Europea con un acuerdo”.

     May, quien tiene 61 años de edad, enfrenta grandes presiones al interior de su país para lograr un acuerdo favorable de salida, cuyo proceso inició con el referéndum de junio de 2016 y cuya fecha límite de negociación es el 29 de marzo de 2019.

     Incluso, hay quienes creen que la permanencia de May en el cargo está en juego, pues al interior de su coalición gobernante ha sido criticada por no tener un acuerdo listo y por no ser lo suficientemente dura frente a la Unión Europea.

     Otros, sin embargo, creen que el Brexit no es viable e, incluso, quieren realizar un nuevo referéndum sobre la permanencia en la Unión Europea.

     “No tener acuerdo no es opción”, dijo Jeremy Corbyn, líder del partido laborista inglés y líder de la oposición de May.

     Por su parte, la Unión Europea dijo que el plan que los británicos presentaron en Salzburgo no era viable e, incluso, aprobaron una reunión extraordinaria para tratar el tema en noviembre, lo que para muchos es la última oportunidad de llegar a un acuerdo antes de la fecha límite.

     “Hemos demostrado que aquellos que decían que estarían bien sin Europea, que todo estaría bien, que habría más dinero, son mentirosos”, dijo Emmanuel Macron, el presidente de Francia, durante la reunión de Salzburgo. “El Brexit nos muestra algo: que no es fácil salir de la Unión Europea sin complicaciones ni consecuencias y pláticas largas”.

     Jean-Claude Juncker, el presidente de la Comisión Europea y parte del equipo negociador para ese bloque en el Brexit, dijo por su parte que es necesario tener cuidado en estas negociaciones para no dañarse mutuamente. “Cuando dos erizos se abrazan deben tener cuidado de no rasguñarse”, dijo el funcionario, en entrevista con medios tras la reunión en Austria. 

     Los mercados reaccionaron de manera negativa luego de las palabras de May en Londres. La libra esterlina caía 1.5% frente al dólar estadounidense y retrocedía 1.2% frente al euro.