Un puesto de venta de verduras y vegetales en el mercado Medellín, en Ciudad de México. Foto de AP/Rebecca Blackwell.
Un puesto de venta de verduras y vegetales en el mercado Medellín, en Ciudad de México. Foto de AP/Rebecca Blackwell.

22 de feb. (Sentido Común) -- La inflación en México sorprendió favorablemente al inicio de febrero, al registrar una caída que llevó al Índice Nacional de Precios al Consumidor a ubicarse por primera vez dentro del rango objetivo de Banco de México en poco más de dos años, lo que probablemente ayudará a reducir las presiones que tiene la junta de gobierno para continuar el ciclo de restricción monetaria.

     Los precios al consumidor en el país tuvieron una caída inesperada de 0.1% con respecto a los 15 días previos, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, gracias al comportamiento favorable que tuvieron algunos productos agropecuarios.

     “El hecho de que la inflación haya registrado una desaceleración más rápida en las últimas quincenas. . . sugiere que el balance de riesgos para la inflación está ligeramente más balanceado que antes”, escribieron los analistas de Citibanamex, en un reporte. “Sin embargo, hay que tener en cuenta que la caída de la inflación sigue siendo impulsada principalmente por los precios no subyacentes, en particular el subíndice de precios de las frutas y verduras que es altamente volátil”.

     La inflación no había mostrado una caída en una primera quincena de febrero desde el año 2002, cuando los precios disminuyeron 0.26% frente a la segunda mitad de enero de ese año.

     Con esta baja, la inflación interanual desaceleró hasta alcanzar una tasa de 3.89%, la menor desde diciembre de 2016 y dentro del llamado rango de confort del Banco de México, de acuerdo con datos de Inegi, como también se conoce al organismo responsable de recabar la información económica y social en el país.

     La autoridad monetaria local tiene un objetivo para la inflación de 3%, aunque estima un intervalo de 1% --hacia arriba y hacia abajo-- donde considera que los precios están bajo control.

     El desempeño de los precios al consumidor en la primera quincena de febrero resultó menor que las estimaciones de los economistas encuestados por Infosel, quienes anticipaban un incremento quincenal de 0.04% y un avance de 3.91% con respecto al mismo lapso de febrero del año pasado.

     “Fuerte desaceleración de la inflación en México”, escribieron los analistas de Intercam Casa de Bolsa, en un reporte. “Los datos apuntan a una tendencia de baja en la inflación que, de confirmarse en los meses siguientes, podría liberar las presiones para mantener tasas altas de interés por parte del Banco de México”.

     Los productos que más incidieron a la baja en la inflación de esta quincena fueron el jitomate, el chile serrano, el tomate y otros chiles frescos, que en su conjunto restaron casi 0.3 puntos porcentuales al índice.

     Estas reducciones compensaron las alzas observadas en la cebolla, el huevo, azúcar, vivienda propia y gasolina de bajo octanaje, que estuvieron entre los bienes que más presionaron a los precios de la primera mitad del mes.

     Aunque en la lectura general la inflación continuó su tendencia bajista, el componente subyacente de los precios, o aquella medida que excluye los cambios en productos altamente volátiles como energéticos y agropecuarios, no tuvo el mismo desempeñó y presentó un crecimiento de 0.26% durante la primera quincena de febrero, mientras que avanzó 3.51% en términos anuales.

     Ese incremento de los precios subyacentes rebasó las expectativas de los analistas encuestados por Infosel, quienes esperaban un incremento de 0.21% con respecto a la quincena previa y una avance interanual de 3.43%.  

     Ayer, en la publicación de la minuta del último encuentro de política monetaria, los integrantes de la junta de gobierno del Instituto Central ya habían expresado inquietud por la resistencia de la inflación a bajar, a pesar del ciclo contractivo de tasas que aplicó el banco central desde finales de 2015.

     A pesar de ello, algunos analistas incluso creen que la desaceleración de la inflación será suficiente para invitar a los integrantes de Banco de México a considerar un recorte a la llamada tasa de interés objetivo más adelante este año.

     “Las minutas correspondientes a la reunión de política de inicios de este mes (publicadas ayer) fueron más dovish sobre la economía pero continuaron hawkish en la inflación”, escribió Edward Glossop, economista para América Latina con la consultoría británica Capital Economics, en un reporte. “El dato de febrero podría incidir de alguna forma en persuadir a los responsables de la política monetaria en que la trayectoria de la inflación está actualmente en una tendencia bajista”.

     En la jerga económica se define como dovish a los comunicados donde los responsables de la política monetaria expresan preocupaciones por el bajo crecimiento económico y, por lo tanto, son más proclives a preferir tasas de interés bajas.

     Por el contrario, se conoce como hawkish a aquellos banqueros que están más pendientes de la evolución de la inflación y están más inclinados a pedir tasas altas para evitar un aumento de los precios.

    

 

 


Fecha de publicación: 22/02/2019

Etiquetas: méxico inflación economía inegi precios consumidor