La atención dirigida a la calidad y seguridad de los pasajeros de autos se intensificó recientemente debido a que uno de los fabricantes de automóviles más relevantes de Alemania emitió un llamado a revisión de sus bolsas de aire y a que la ensambladora japonesa, Honda Motor, impuso recortes salariales a sus ejecutivos en un esfuerzo por asumir la responsabilidad de esos defectos.

      Audi, la marca de lujo de Volkswagen, llamó a revisión a 850,000 sedanes Audi A4 por un fallo en la programación de ese auto que puede evitar que se desplieguen las bolsas de aire.

     Ejecutivos de Audi dijeron que el problema no está relacionado con las de bolsas de aire defectuosas de alto perfil, de marca Takata, que afectan a por lo menos 12 millones de vehículos a nivel mundial y añadió que "es una cuestión de tres minutos" para que los consumidores obtengan la actualización del programa.

     La empresa agregó que se están investigando los accidentes que puedan estar relacionados con dicho problema.

      El funcionamiento de las bolsas de aire de Audi es la preocupación más reciente en una industria consumida por los llamados a revisión de autos. En 2014 se han emitido llamados a revisión que afectan a decenas de millones de vehículos, costándoles miles de millones de dólares a las automotrices y abollándoles la reputación a los ejecutivos y a las empresas que dirigen.

 



Fecha de publicación: 24/10/2014