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En ocasiones se siente bien portarse mal. Después de años de una restricción impuesta por la recesión, los consumidores estadounidenses tienen más dinero en sus bolsillos, y parte de ese dinero lo están destinando a sus placeres pecaminosos favoritos.
El gasto real del consumidor subió 3.4% en el año que terminó en enero, la mayor cantidad desde 2006. He aquí los placeres indignos que ganaron más sus corazones y su dinero arduamente ganado.
1. Apuestas
Los estadounidenses deben haberse sentido ya sea con suerte o desesperados en 2014. Los grandes apostadores jugaron mucho a los dados, ya que el gasto en los juegos de azar de los casinos aumentaron 10.7% en el año que finalizó en enero, el mayor incremento registrado desde diciembre de 2006. Las loterías también registraron una alza marcada de 1.8%.
2. Alcohol
El consumo de bebidas embriagantes escenificó una impresionante recuperación. El gasto en alcohol durante las comidas (en bares y restaurantes) subió 8.3% en enero. Los estadounidenses no habían mostrado tanto afán por beber desde diciembre de 2001. Afortunadamente, las personas se comportan mejor cuando se trata de hacer compras de alcohol para su consumo "fuera del establecimiento", con un respetable aumento de un punto porcentual.
Eso podría significar que el aumento en los bares y restaurantes se debió a algo más que la necesidad ardiente de pasarla bien. De cualquier manera, ya son las cinco de la tarde en alguna parte, ¿o me equivoco?
3. Dulces
Cuando el Departamento de Comercio dice que el gasto aumentó 2.9% en productos de panadería, es probablemente seguro asumir que ellos quisieron decir cupcakes.
Los medios de comunicación pueden haber declarado el final del reinado de la magdalena como la adicción azucarada favorita de Estados Unidos, pero nos resulta difícil creer que el pan o los pastelillos superaron al pastel (o a toda la masa para hornear!) en el alza de enero en el gasto.
Los perdedores: el café y cigarrillos
Se dice que el café y los cigarrillos son artículos de consumo "a prueba de recesión" porque la gente gasta en estos pequeños placeres aún cuando los tiempos son difíciles. En enero, los estadounidenses deben haber cambiado el gusto por la cafeína o la nicotina por el alcohol, ya que el gasto cayó en cada uno de estos artículos. Los gastos en el café, té y otras bebidas cayeron 2.6%, mientras que el tabaco fue el mayor perdedor, al caer 3%.
Fecha de publicación: 27/03/2015