La junta de gobierno de Banco de México decidió mantener sin cambio su tasa de interés interbancaria en 3% a fin de mantener la inflación cerca de su objetivo inter-anual e impulsar el crecimiento de la economía mexicana.

     Si bien el banco central dijo que la economía mundial continúa mostrando debilidad mientras que la inflación sigue en niveles históricamente bajos, lo que a su vez a permitido anclar las expectativas inflacionarias, también mostró cierta preocupación por el desempeño de la moneda mexicana, principalmente en relación con las acciones que pueda tomar la Reserva Federal estadounidense en materia de tasas de interés.

     "Las posibles acciones de política monetaria por parte de la Reserva Federal podrían tener repercusiones adicionales sobre el tipo de cambio, las expectativas de inflación y, por ello, los precios en México", dijo el banco central, en el comunicado en el que dio a conocer su decisión de mantener su tasa de referencia.

     Ante el nuevo escenario de incertidumbre y por implicaciones directas que podría tener un alza de tasas en Estados Unidos, el banco central mexicano decidió, hace unos días, cambiar el calendario de sus reuniones de política monetaria para sincronizarlas con las que está realizando la el comité de la política monetaria estadounidense en la Fed.

     Esto con el objetivo de poder reaccionar de inmediato a ese aumento y poder así intentar controlar el tipo de cambio y con él las expectativas inflacionarias, y, en últimos términos, la inflación.

     Además, el banco central dijo en el comunicado que "se mantendrá atento a la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas para horizontes de mediano y largo plazo".

     La preocupación del Banco de México sobre el impacto de una mayor depreciación del peso en la inflación quedó además de manifiesto cuando la Comisión de Cambios, en la que participa el banco central mexicano, anunció un incremento en el monto de la subasta diaria de dólares que utiliza para inyectar liquidez al mercado cambiario y así tratar de reducir la volatilidad del tipo de cambio.

     Además, la Comisión de Cambios, que también integra a funcionarios de la Secretaría de Hacienda, redujo la brecha entre el precio de cierre de ayer y al que subasta otros 200 millones de dólares, de 1.5 a 1%, a fin también de poder inyectar más dólares al mercado cambiario en caso de una depreciación de más de 1% durante la jornada.

     Con ambas medidas, el gobierno mexicano estaría inyectando hasta cerca de 17,600 millones de dólares al mercado en los próximos tres meses, ya que la fecha en que ese tipo de subastas terminaría es el 30 de septiembre, a menos, claro, que las autoridades opten por prolongarlas como han hecho hasta ahora desde diciembre.

     El peso ha registrado sus peores caídas respecto al dólar en los últimos días. Hoy, la moneda mexicana cerró en 16.26 pesos por dólar, con una ganancia de 0.1% frente al cierre de ayer, gracias al anuncio de la Comisión de Cambios.

     Antes de ese anuncio, el peso se había debilitado 1.3% frente al dólar.

     Para algunos analistas la decisión de Banco de México confirma que el futuro de la política monetaria mexicana está, en cierto sentido, directamente relacionado con las decisiones que tomará la Fed en sus próximas reuniones.

     "Banco de México reafirmó nuestra expectativa de que la postura monetaria se mantendrá reactiva a las decisiones de la Reserva Federal, pese a la depreciación del peso", escribió Joan Enric Domene, economista de Banco Invex, en un reporte.    

 

 



Fecha de publicación: 30/07/2015

Etiquetas: Banco de México política monetaria tasa de interés de referencia economía crecimiento inflación tipo de cambio Fed