El escándalo por la renuncia de Michael Flynn, quien era el principal asesor en materia de seguridad del presidente Donald J. Trump, por una conducta irregular con respecto a comunicaciones que tuvo con diplomáticos rusos antes de ser nombrado oficialmente a su cargo, parece lejos de terminar.

     Ahora, Trump se lanzó nuevamente contra los medios de comunicación con diversos mensajes publicados en su cuenta de Twitter luego de conocerse reportes adicionales que sugieren que Flynn no fue el único del círculo cercano al presidente que se comunicó con los rusos.

       A través de la cuenta @realDonaldTrump, el empresario convertido en político de afiliación republicana dijo que esas nuevas revelaciones eran falsas y que considera realmente preocupante la filtración de información clasificada a los medios.

     “Los medios de noticias falsas se vuelven locos con sus teorías de conspiración y odio ciego. Esta conexión sin sentido con Rusia es un intento de cubrir errores hechos durante la campaña perdedora de Hillary Clinton”, escribió Trump en esa red social. “El verdadero escándalo aquí es que información clasificada es ilegalmente entregada como dulces por la ‘inteligencia’. ¡Poco estadounidense!”.

     Las afirmaciones de Trump responden a un reporte del periódico estadounidense The New York Times en el que relató que los contactos de Flynn con los rusos no son los únicos y de hecho podrían haber iniciado desde la campaña presidencial del republicano.

     “Registros telefónicos y llamadas interceptadas muestran que miembros de la campaña presidencial de Donald J. Trump en 2016 y otros socios de éste tuvieron contactos repetidos con oficiales de inteligencia rusos de alto nivel un año antes de las elecciones”, dijeron fuentes oficiales al periódico estadounidense.

     El diario indicó que Paul Manafort, ex director de la campaña presidencial de Trump y quien renunció antes de las elecciones, fue otro allegado al presidente que pudo establecer contacto con los rusos.

     “Muchos de los socios de Trump, como Manafort, han hecho negocios en Rusia y no es inusual para los empresarios estadounidense ponerse en contacto con oficiales de inteligencia de otros países, pero funcionarios no revelan hasta donde el contacto fue por negocios”, dijeron las fuentes a The New York Times, lo que desató la ira de Trump. 

      Los contenidos de las llamadas, así como sus interlocutores no fueron divulgados, por lo que no se puede establecer si las conversaciones fueron políticas o casuales, lo que podría ser un tema puesto que en Estados Unidos es ilegal hablar de cuestiones de política exterior con miembros diplomáticos de otros países sin estar debidamente acreditado.

 

 

 

 



Fecha de publicación: 16/02/2017

Etiquetas: EUA Flynn seguridad medios Rusia