Exxon Mobile, una de las principales empresas de energía a nivel global, abrirá su primera gasolinera en México en el segundo semestre del año, una empresa más que se suma a la cada vez más larga lista de empresas nacionales y extranjeras que pelearán por el mercado de combustibles en el país.

La primera estación de gasolina operará bajo la marca Mobile en la región central de México y posteriormente se irán abriendo más, dijo la compañía en un comunicado en el que no precisó la ubicación de esa gasolinera.

Aunque Exxon no dijo cuántas estaciones planea abrir, previó una inversión de 300 millones de dólares durante los próximos 10 años para logística, productos y mercadotecnia.

“La reciente reforma energética presenta una oportunidad única en el mercado mexicano para ayudar a satisfacer la creciente demanda de combustibles y un servicio más competitivo”, dijo Martin Proske, director de combustibles de ExxonMobil México, en un comunicado.

Además, la petrolera, con presencia en los cinco continentes, dijo que ofrecerá en sus estaciones su línea de productos Synergy, que tienen como base el combustible que ella misma produce.

La llegada de la estadounidense pone de relieve un negocio que está aparentemente generando gran apetito para compañías locales y extranjeras, que están interesadas en las oportunidades que brinda la reforma energética promulgada en 2013.

En México existen aproximadamente 11 mil 800 gasolineras que si se repartieran el parque vehicular de México, les correspondería atender a más de tres mil 300 autos, el doble que sus similares de Estados Unidos, de acuerdo con un reporte de BBVA Bancomer.

 De ahí, que algunos expertos estimen que en México podrían instalarse el doble de terminales de servicio de las que existen actualmente en el país.

Ante este potencial crecimiento, muchas empresas están, a su vez, planeando ofrecer diversos servicios a esas empresas dedicadas a la venta de gasolina y otros combustibles al menudeo. Dentro de esos servicios están la posibilidad de importar combustibles a través de los puertos nacionales, de almacenarlos y de transportarlos a sus centros de distribución.

De hecho, un consorcio que está ya planeando ofrecer esos servicios en el puerto de Tuxpan es el conformado por las empresas Sierra Oil & Gas, Transcanada y Grupo TMM.

Otras empresas que están también planeando contar con estaciones de servicio en el país son: la británica BP, que en marzo dijo que abriría mil 500 gasolineras en México en los próximos cinco años como parte de la estrategia de expansión de su negocio minorista; Shell, de origen anglo-holandés, que tiene contemplado participar en el mercado de las gasolineras mediante franquicias y estaciones propias, así como la estadounidense Gulf, que fue de las primeras en develar su interés por participar en el mercado minorista de las gasolinas.

Diversas compañías mexicanas como Oxxo Gas, la división de combustibles de Fomento Económico Mexicano; Petro-7, perteneciente a la franquicia de tiendas de conveniencia 7-Eleven; el grupo gasolinero Hidrosina y La Gas cuentan ya también con presencia en el mercado al detalle de venta de combustibles y han hablado de planes de expansión.

Uno de los puntos a favor con los que cuentan las nuevas empresas gasolineras  es que los automovilistas mexicanos al parecer tienen la precepción de que en este tipo de establecimientos, desligados a las franquicias de Petróleos Mexicanos, la empresa petrolera estatal, la cantidad de combustible que adquieren es la que los establecimientos dicen que venden y cobran.



 

 



Fecha de publicación: 17/05/2017

Etiquetas: Exxon Mobile energía México gasolina combustibles reforma energética