GMéxico Transportes estima en 312 mdp el costo de los sabotajes

GMéxico Transportes, la división ferroviaria y de logística de Grupo México, estimó en 312 millones de pesos (15.9 millones de dólares) el impacto de los sabotajes que han sufrido sus trenes en la ruta Ciudad de México-Veracruz entre abril y mayo.

     Esa cifra corresponde a los siete altercados que ha visto la compañía en los últimos dos meses, los cuales han provocado el descarrilamiento de sus trenes, dijo en un comunicado.

     “Reiteramos nuestro compromiso de seguir brindando un servicio seguro y eficaz con más de mil 700 guardias privados y un área especial dedicada al monitoreo y prevención de robos”, escribió la empresa matriz de Ferromex y Ferrosur, con las que tiene la mayor participación de mercado en México.

     GMéxico Transportes dijo que la afectación se debe a que ha perdido ventas por 130 millones de pesos (6.6 millones de dólares), le han robado mercancía por aproximadamente 11 millones (562 mil dólares), y la reparación de vías y locomotoras le ha costado 171 millones (8.7 millones).

     No obstante, el impacto a las finanzas de la ferroviaria será menor a esos números, debido a que cuenta con recuperación vía seguros, en una proporción que no detalló.

     La compañía, que debutó con acciones en bolsa el año pasado, dijo que trabaja y tiene el apoyo del Ejército, la Marina, la Gendarmería y la policía estatal.

     La pérdida que podría tener GMéxico Transportes por los atracos a sus trenes representa menos de medio punto porcentual tanto de sus ingresos como de su flujo de operación trimestral, aunque claro, habría que ampliar el periodo de afectaciones y considerar todas las rutas para tener una idea más clara.

     Tan solo en el primer trimestre de 2018 la empresa vio 720 incidentes de este tipo, cinco veces más que el mismo periodo del año anterior.

     Los números salen a la luz una semana después de que la subsidiaria de Grupo México diera a conocer que uno de sus trenes sufrió la manipulación del sistema de frenos y la división de sus vagones por parte de personas ajenas, lo que provocó el deslizamiento de 39 carros y cuatro locomotoras que se impactaron con un tren estacionado en el patio ferroviario de Orizaba.

     GMéxico Transportes alertó en abril sobre el incremento de sabotajes a sus trenes, lo que ya había afectado sus ingresos en aproximadamente 300 millones de pesos (15 millones de dólares en su momento).