El gobierno de Estados Unidos dijo que impondrá un nuevo paquete arancelario en contra de productos originarios de China, informó el United States Trade Representative (USTR), la oficina responsable de dictar las políticas comerciales estadounidenses.

     Esta decisión no sólo representa un nuevo capítulo en la tensión comercial entre las dos mayores economías del planeta, sino que cumple con una advertencia que lanzó hace unas semanas la Casa Blanca respecto a que los estadounidenses no están dispuestos a ceder en sus intenciones de conseguir un comercio que consideren más justo y recíproco a sus intereses.

     El presidente Donald J. Trump fue quien ordenó gravar con arancel de 10% a varios productos chinos, por un valor de hasta 200 mil millones de dólares, como represalia a la imposición de tarifas por 34 mil millones de dólares que anunció el gobierno de ese país asiático a las mercancías estadounidenses.

     “Como resultado de las represalias de China y de la falta de cambio en sus prácticas, el presidente ordenó al USTR que comience el proceso de imponer aranceles del 10% sobre 200 mil millones adicionales a las importaciones chinas”, dijo Robert Robert Lighthizer, el representante comercial del gobierno de Trump, en un comunicado.

     La lista de productos que serán gravados con arancel abarca alimentos como pescado, salmón, langosta, así como diversos vegetales y frutas.  

     También enfrentarán aranceles ciertos bienes de consumo como llantas, correas para perros, bolsos de mano, guantes de béisbol, muebles, prendas de vestir, colchones, lámparas eléctricas y cámaras de televisión, así como componentes de teléfonos y pantallas planas.

     No es claro de qué manera responderá China a las medidas del gobierno de Trump, aunque en el pasado ya actuó de manera simétrica, por lo que muchos temen que esta disputa acabe por generar una guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo.

     “Durante más de un año, la administración Trump ha instado pacientemente a China a que deje de aplicar prácticas desleales, abra su mercado y participe en una verdadera competencia en el mercado”, agregó Lighthizer, el titular de USTR, en su comunicado. “Lamentablemente, China no ha cambiado su comportamiento, un comportamiento que pone en riesgo el futuro de la economía de los Estados Unidos”.

El nuevo paquete de aranceles que impondrá Estados Unidos sobre los productos chinos no entrará en vigor de manera inmediata sino en los próximos dos meses, con la intención de que ambos gobiernos vuelvan a dialogar para resolver su disputa comercial.

 





Fecha de publicación: 10/07/2018

Etiquetas: EUA arancel bienes China comercio economía Trump