os tomateros mexicanos dijeron que continuarían buscando una acuerdo con Estados Unidos. Foto de archivo.
os tomateros mexicanos dijeron que continuarían buscando una acuerdo con Estados Unidos. Foto de archivo.

Productores mexicanos de tomates dijeron estar comprometidos en mantener el suministro a sus clientes en Estados Unidos, aun si el Departamento de Comercio mantiene su posición de retirarse del acuerdo que ha regulado durante los últimos años las importaciones mexicanas de ese fruto.

     Los productores, que dijeron estar preparados financiera y logísticamente para atender el mercado estadounidense, señalaron que mantendrán su última oferta de negociación –que consideraba incrementos de precios entre 6 y 34%--y que la apoyarán hasta que sean invitados a continuar con las negociaciones “en una atmósfera de beneficio mutuo”, de acuerdo con un comunicado emitido por la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida (AMHPAC), que agrupa intereses de algunos agricultores.

     “Continuaremos negociando con el secretario Ross y su equipo para asegurarnos de que todas las partes entiendan que los tomates frescos de México son un producto de consumo complementario y de gran demanda en Estados Unidos y lo han sido durante más de dos décadas”, agregó AMHPAC.

      El organismo agregó que no dejaría que una “lucha política” orquestada por un grupo de productores del estado de Florida, rompiera con un suministro ininterrumpido durante los últimos 20 años.

     El 7 de mayo concluye el plazo para que los productores mexicanos lleguen a un acuerdo con el Departamento de Comercio de Estados Unidos para restituir el pacto que suspende las medidas antidumping contra este producto mexicano que se establecieron hace más de 20 años.

     A partir de esa fecha, y si las negociaciones no fructifican, Estados Unidos podría comenzar a cobrar una cuota de 17.65% del valor de las importaciones de este producto mexicano al país, una situación que podría impulsar entre 40 a 85% el precio del tomate en ese país, dependiendo de la temporada.

    Los productores de tomate o jitomate de México fueron culpados en 1996 de ejercer prácticas de comercio desleal en sus exportaciones hacia Estados Unidos y por consiguiente, se hicieron acreedores de cuotas antidumping.

     Para evitar la penalización, los agricultores establecieron un acuerdo que establece precios mínimos con las autoridades estadounidenses, mismo que se renovaba cada cinco años, hasta 2018, cuando luego de varios intentos de sentarse a la mesa, los mexicanos no lograron establecer diálogo con el Departamento de Comercio.

     La última renovación, que debió acordarse el año pasado, no pudo ser concretada al quedar atrapada en medio de la renegociación del nuevo acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como por el cierre del gobierno estadounidense a finales de 2018.

     Luego de que Estados Unidos reactivó las operaciones del gobierno a inicios del año, una de las primeras medidas del Departamento de Comercio fue anunciar en febrero su salida del acuerdo, en línea con las demandas de productores de estados como Florida y para sorpresa de los tomateros mexicanos que habían buscado el diálogo para establecer los nuevos términos desde finales de 2017.

 

  

 



Fecha de publicación: 25/04/2019

Etiquetas: Tomate México EUA comercio acuerdo antidumping