Pemex y Braskem delinean cambios a suministro etano y alistan planta de 400 mdd

28 de sep. (Sentido Común) -- Petróleos Mexicanos, la empresa petrolera estatal también conocida como Pemex, definió las condiciones del contrato para suministro de gas etano a Braskem Idesa, el negocio conjunto de la mexicana Idesa y de Braskem, la filial en el país del conglomerado brasileño Odebrecht, medio año después de anunciar la renegociación tras ser considerado abusivo por la administración del presidente, Andrés Manuel López Obrador.

     Los cambios contemplan una reducción en el suministro de etano al volumen mínimo de 30 mil barriles diarios hasta la segunda mitad de 2024 o hasta febrero de 2025, además de que Braskem Idesa tendrá preferencia para comprar toda la materia prima que Pemex tenga disponible --exceptuando el de consumo propio-- hasta 2045 a precios del mercado.

     Aunado a ello, la petrolera estatal participará en la construcción de una terminal de almacenamiento de etano en la Laguna de Pajaritos, en Coatzacoalcos, Veracruz, con una inversión de 400 millones de dólares y cuyo desarrollo estará a cargo de Braskem Idesa, encargada de la operación del megacomplejo petroquímico Etileno XXI.

     “Esto garantizará el acceso a diversas fuentes de materia prima para producir a plena capacidad y abastecer el mercado local e internacional”, dijo Braskem en un comunicado en el que ofreció algunos detalles. “Los acuerdos permitirán la sostenibilidad a largo plazo de la planta ubicada en Nanchital de Lázaro Cárdenas del Río, en Veracruz, México”.

     La planta de almacenamiento de etano formará parte del área del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, por lo que fue necesario la firma de un acuerdo con la Administración Portuaria Integral de Coatzacoalcos, agregó.

     La planta de almacenamiento entraría en funciones en la segunda mitad de 2024, o bien a principios de 2025 si es que se presentan retrasos en su construcción, estimó la petroquímica brasileña.

     Además, los cambios aún están sujetos a la aprobación final de los consejos de administración de Pemex y Braskem, así como de los acreedores del negocio conjunto con Idesa.

     El anuncio de hoy parece ser la culminación de una disputa que saltó al ojo público a mediados del año pasado, cuando el presidente López Obrador calificó, en una de sus habituales conferencias matutinas, que los términos del contrato --firmado en 2010 durante la administración del ahora expresidente Felipe Calderón-- eran “un robo a la nación”.

     “Cómo vamos a seguir pagando por ese contrato que firmaron durante el gobierno de Calderón, que obliga a dar un subsidio con hasta 40% por el gas que Pemex le entrega a esa planta, ya Pemex está haciendo los trámites para que no se mantenga ese contrato leonino", dijo el mandatario en aquella ocasión.

     El gobierno de México cumplió los amagos del presidente en los primeros días de diciembre, y tres meses después la administración de López Obrador anunció la renegociación con Braskem Idesa, lo que le representaría ahorros por 13 mil 749 millones de pesos (667 millones de dólares al tipo de cambio de hoy) para la petrolera estatal.

     Dicha renegociación contemplaba la reducción del suministro obligado de etano --hasta ese momento establecido en 66 mil barriles diarios por un periodo de 20 años--, el pago de etano a precios del mercado por parte de Etileno XXI, al tiempo que empezaría a asumir costos que venía trasladando a la compañía estatal, como el transporte.

     “El contrato de suministro de etano entre Braskem Idesa y Pemex se mantiene en plena vigencia. En ese momento, Braskem Idesa no puede predecir el resultado de las discusiones con Pemex, sus accionistas y acreedores”, dijeron directivos de Braskem en una conferencia con analistas e inversionistas días después del anuncio por parte del gobierno mexicano.