Kavak alcanza valuación de 4,000 mdd tras reciente ronda de inversión

7 de abr. (Sentido Común) -- A Kavak, una plataforma digital para comprar y vender autos usados, le tomó cuatro meses multiplicar por cuatro la valuación que la llevó a ser considerada el como el primer ‘unicornio’ mexicano, un calificativo asignado a empresas tecnológicas jóvenes que alcanzan una valuación de mil millones de dólares.

     La nueva valuación de Kavak de cuatro mil millones de dólares está justificada tras cerrar en enero, ya superada la etapa de capital semilla inicial, la cuarta ronda de financiamiento --conocida como serie D-- en la que obtuvo 485 millones de dólares de inversionistas como D1 Capital Partners, Founders Fund, Ribbit y BOND, dijo Kavak, en un comunicado.

     “Kavak se ha convertido rápidamente en la marca automotriz líder y más confiable de Latinoamérica, y aún presentará un crecimiento acelerado tanto en la región como en otros mercados internacionales", dijo Dan Sundheim, fundador y jefe de inversiones de D1 Capital Partners, citado en el comunicado.

     Esta nueva valuación, que fue dada a conocer por la empresa tres meses después del cierre del financiamiento, posiciona a Kavak como la cuarta startup más valiosa de América Latina, dijo la empresa. Esto la ubica al nivel de compañías como la argentina Mercado Libre, la colombiana Rappi, o las fintechs brasileñas PagSeguro y Nubank.

     En octubre de 2020, Kavak cerró su tercera ronda de inversión que le permitió obtener un respaldo financiero por 400 millones de dólares de firmas de capital privado como SoftBank, Greenoaks, DST Global, Kazsek Ventures, QED Investors y General Atlantic. Con esa inyección su valuación alcanzó los mil 150 millones de dólares y el mote de ‘unicornio’.

     A lo largo de su existencia, que se remonta a 2016, ya logró levantar 900 millones de dólares de capital privado.

     Kavak cuenta actualmente con 20 centros logísticos y de reacondicionamiento en México y Argentina --tras la fusión de la startup local Checkars--, así como una plantilla laboral de dos mil 500 personas.

     La aceleración en el valor de la empresa está en línea con una tendencia en la cual el valor de los negocios deriva cada vez más de plataformas digitales, software y otras inversiones intangibles en lugar de activos físicos y relaciones tradicionales, un hecho que se ha exacerbado por la pandemia y la mayor confianza en las transacciones virtuales.

     Esta situación fue clara en 2020, marcada por el aislamiento motivado por la covid-19 y un año complicado para la industria automotriz, cuando la venta de automóviles nuevos en México cayó 28%.

     En contraste, Kavak dijo en octubre que registraba crecimiento superior a 100%.   La compañía ofrece un modelo de financiamiento y garantías personalizado a cada cliente y permite agilizar el proceso de vender y comprar un auto con seguridad. Kavak logró adaptar aún más este modelo de negocio y creó el año pasado nuevos productos digitales para la nueva realidad.

     “En estos últimos meses que hemos visto cómo el mundo ha cambiado, muchas personas empezaron a utilizar plataformas tecnológicas para vivir su día a día, un avance en e-commerce y nosotros en este momento somos la única plataforma que lo puedes hacer con esa tranquilidad”, dijo Carlos García Ottati, fundador y director general de Kavak, en entrevista, en octubre.

     Los planes de la empresa en el mediano plazo apuntan al crecimiento. De hecho, los recursos frescos serán utilizados por Kavak para expandir su operación en Brasil, el mayor mercado de la región latinoamericana, y a otros mercados alrededor del mundo en los próximos 24 meses.

     Por eso, no sorprende que el logo de Kavak acompañará al piloto mexicano de la Formula 1, Sergio Pérez, alrededor del mundo, a partir de su llegada a la escudería Red Bull Racing, una de las dos que luchará por el campeonato en 2021.

     Un patrocinio que muestra también la importancia que ha ganado la empresa codeándose, al menos en el casco del piloto, con las instituciones financieras Banorte y Unifin; y las marcas Telcel y Claro de América Móvil, la principal empresa de telecomunicaciones de la región latinoamericana.