Braskem Idesa tomará las medidas legales aplicables para proteger sus derechos. Foto Braskem Idesa.
Braskem Idesa tomará las medidas legales aplicables para proteger sus derechos. Foto Braskem Idesa.

2 de dic. (Sentido Común) -- El gobierno de México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, cumplió su amenaza y canceló el contrato que permitía el suministro de gas natural a Etileno XXI, el complejo petroquímico de Braskem Idesa, que ha acusado varias veces y sin pruebas de presunta corrupción.

     Braskem Idesa interrumpió sus actividades operativas, tras ser notificada por el Centro Nacional de Control de Gas Natural (Cenegas), la agencia del gobierno encargada del abasto de gas en el país, de la terminación “unilateral” del servicio de transporte de gas natural, dijo Braskem, una petroquímica brasileña que tiene un interés de 75% en ese centro, en un comunicado dirigido a sus inversionistas.

     El fin del suministro fue confirmado esta mañana por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien señaló que no se trató de una cancelación, sino que no se renovó el contrato.

     “Sí, me informaron hoy en la mañana de que habían notificado a la empresa porque no se está corrigiendo el contrato leonino que se suscribió desde el tiempo de Calderón, que es contrario a la hacienda pública, es un contrato con Odebrecht, esta empresa que es famosa por las extorsiones y por la corrupción”, dijo el presidente de México, durante su conferencia matutina. “Entonces, ya no hay gas natural para la empresa porque se venció el contrato. No se interrumpió, sino llegó a su fecha límite y ya no se va a renovar”.

     Desde hace varios meses el gobierno lopezobradorista mantenía una polémica con Braskem Idesa, al considerar que el contrato que firmó Petróleos Mexicanos, la empresa de energía estatal, para el suministro de etileno a la empresa para producir polietileno, se dio en condiciones comerciales desventajosas para la petrolera.

     En diversas ocasiones el presidente de México señaló incluso la posibilidad corrupción en el acuerdo firmado durante la administración del presidente Felipe Calderón.

     Las sospechas de corrupción del gobierno cobraron fuerza en agosto tras darse a conocer algunas declaraciones de Emilio Lozoya Austin, ex director general de Pemex bajo la administración de Enrique Peña Nieto, quien funge como testigo de la Fiscalía General de la República.

     En un expediente que circuló en redes sociales, Lozoya cuenta que pactó la entrega de sobornos con ejecutivos de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de resultar favorecida con contratos una vez que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) asumiera el poder a finales de 2012.

     Lozoya también declaró al respecto del proyecto Etileno XXI --que se estableció en el gobierno previo de Felipe Calderón--, señalando que se dio en condiciones irregulares que perjudicaron las finanzas de Pemex.

     “El negocio que hicieron los brasileños es que Pemex le vendería a Braskem el etano, ya que Pemex era el único proveedor, pero le hacían un descuento inexplicable de más de 25% sobre el precio de mercado, lo que hacía súper desventajosa la posición de Pemex”, revela el expediente, sin aclarar que la empresa estatal podía aparentemetne también beneficiarse de los resultados de Etileno XXI. “Muchos mexicanos hubieran deseado un contrato así tales como Grupo Alfa o Grupo Desc, entre otros. Sin embargo, por razones estrictamente políticas se le dio a Braskem”.

     Braskem Idesa ha rechazado reiteradamente los señalamientos y defendido la integridad de sus operaciones.

     En una de sus menciones más recientes sobre el tema, a mediados de noviembre, el presidente López Obrador anunció que el director general de Pemex le habría informado que dejó de cumplir con sus pagos a Odebrecht por considerar que no existían las condiciones adecuadas para seguir respetando el contrato.

     La cancelación del servicio de transporte, anunciada hoy, que podría generar un efecto material en la empresa, será peleada por la empresa en los tribunales.

     “Braskem Idesa tomará las medidas legales aplicables para proteger sus derechos y encontrar una solución al problema, y no puede estimar, en este momento, la fecha para el regreso de sus actividades”, dijo la brasileña filial de la constructora Odebrecht, en el comunicado.

     La alianza estratégica detalló posteriormente, en un posicionamiento, que el 30 de noviembre Cenegas le informó que no renovaría al contrato de servicios de transporte en base firme para el transporte de gas natural y bloqueó un día después el ingreso de gas, incumpliendo con un contrato de base intermitente en vigencia, sin considerar la solicitud de la compañía de mantener 48 horas de suministro reducido para realizar el paro de operaciones de manera segura.

     Braskem e Idesa, que establecieron su sociedad en 2010, fueron las vencedoras de una subasta promovida por Pemex Gas --empresa estatal de México, bajo la administración de Calderón--, para la adquisición de gas etano en condiciones competitivas durante 20 años, a cambio de una inversión de cinco mil 200 millones de dólares para la construcción del complejo petroquímico.

     Etileno XXI fue considerado en su momento el proyecto privado más ambicioso en el país en materia de petroquímica, recibiendo el respaldo financiero de instituciones como International Finance Corporation, el brazo privado del Banco Mundial, entre otros.

     Claro que las grandes expectativas para ese centro se toparon con la baja de producción de hidrocarburos en México, esto a pesar de los esfuerzos de México por atraer inversiones para producir en los yacimientos, algunos de los cuales se encuentran en estado de madurez avanzado.

     Esto ha incrementado de hecho el riesgo de que Pemex tenga que adquirir Braskem Idesa en 2026 por incumplimiento en el suministro, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación ASF, el organismo encargado de auditar las cuentas del gobierno.

     “Existe el riesgo de que en caso de incumplir el contrato de suministro de etano, Pemex tendría que adquirir la planta del Complejo Etileno XXI, (propiedad del consorcio Braskem Idesa), en 2026”, escribió la ASF en el Informe Individual del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2018, publicado en octubre de 2019.

     De hecho, por esta misma situación, Pemex ya pagó entre 2016 y 2018penalizaciones dos mil 813 millones de pesos (150 millones de dólares) a la empresa mexicano-brasileña, de acuerdo con el órgano adscrito a la Cámara de Diputados.

    Ante la baja en el suministro, Braskem Idesa optó por la importación, a partir de este año, de etano tras invertir cuatro millones de dólares en la construcción de una terminal para este fin.

           


Fecha de publicación: 02/12/2020

Etiquetas: Braskem Idesa México petroquimico