28 de jun. (Sentido Común) -- La Suprema Corte de Justicia de la Nación no tiene programado revisar en breve el amparo de América Móvil, la compañía de telecomunicaciones más grande de América Latina, contra las facultades del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) para determinar tarifas asimétricas en materia de interconexión de redes de telecomunicaciones.

     La revisión de esa controversia, contra los cambios constitucionales y las reformas a Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión que permitieron a las autoridades determinar que América Móvil no puede cobrar en México una tarifa a sus rivales por interconectarse a su red por ser una compañía preponderante, lo tomará el Máximo Tribunal más tarde este año.

     De acuerdo a fuentes cercanas al Máximo Tribunal, no existe ni siquiera aun un proyecto en el que se resuelva esa disputa constitucional. Incluso, al interior de la Corte no se conoce aún el nombre del magistrado que será responsable de escribir el proyecto para otorgar o negar el amparo que solicitó la empresa propiedad de Carlos Slim, el hombre de negocios más acaudalado de México.

     América Móvil, con presencia en Estados Unidos, Centroamérica, Sudamérica y Europa, opera en México bajo las marcas Telmex, para los servicios que ofrece de telefonía fija; Telcel, para los de telefonía móvil; e Infinitum, para sus servicios de internet.

     En su controversia, América Móvil argumenta que es inconstitucional que sufra un trato diferenciado, o discriminatorio, en cuanto a tarifas de interconexión, como actualmente ocurre. De ahí que la empresa, con sede en la Ciudad de México, haya solicitado protección de la justicia contra lo que considera un acto de autoridad injusto.

     Sin embargo, para diversos expertos, las facultades de IFT para prohibir a América Móvil cobrar una tarifa de interconexión a sus rivales están respaldadas en la ley y la Constitución, ya que al parecer en ambas se contempla la posible diferenciación de trato cuando una compañía tiene una participación de mercado superior a 50% y ha sido declarada por el ente regulador de la industria como preponderante.

     IFT dio ese calificativo a América Móvil hace tres años como una medida para imponerle regulación asimétrica y con ello asegurar que otras empresas de telecomunicaciones más pequeñas pudieran competir con ella.

     Sin ese trato diferenciado, argumentan algunos expertos, legisladores y analistas, la competencia en la industria de las telecomunicaciones sería prácticamente imposible. Por su tamaño, la empresa de Slim podría, como hizo por más de dos décadas, hasta que se reformó la Constitución y las leyes de telecomunicaciones del país en 2013 y 2014, obstaculizar el desempeño de sus rivales. 

     Actualmente la empresa de Slim mantiene, a pesar de enfrentar reglas asimétricas a lo largo de casi ya dos años, una participación de mercado cercana a 70%, lo representa una caída de tres puntos porcentuales con relación a la que tenía previo a los cambios legales.

     Claro que hasta ahora el efecto más visible de las reglas asimétricas, que han permitido la llegada de nuevos jugadores a la industria de las telecomunicaciones mexicanas, como es el caso de la empresa estadounidense AT&T, antes socia de América Móvil, es la reducción que han registrado los precios de los servicios de telefonía fija, móvil y de internet de México de entre 40 y 60%.

     La caída es lo que hace para muchos relevante el fallo que dará la Suprema Corte de Justicia en las próximas semanas a la solicitud de amparo de América Móvil. Si la empresa de Slim lo gana, esas menores tarifas podrían revertirse en perjuicio de los consumidores y a favor del magnate y de los dueños del gigante de las telecomunicaciones mexicano.

     Además de que si eso ocurre, América Móvil, por su tamaño, podrá volver a dictar los términos bajo los cuáles opera la industria en el país, un elemento que algunos analistas consideran perjudicial no sólo para los consumidores, sino incluso para el crecimiento del país.

     Un fallo a favor de América Móvil “sería engarrotar al mercado en la situación actual como si ya tuviéramos plena competencia y no la tenemos”, dijo Ernesto Piedras, un especialista en telecomunicaciones y director de la consultora the CIU. “Sería una medida contra-reformista. . . [la regulación asimétrica] se ha usado en muchos lugares del mundo para nivelar las cosas”.

 


Fecha de publicación: 28/06/2017

Etiquetas: América Móvil telecomunicaciones México regulación telefonía internet interconexión tarifas IFT gobierno legal Suprema Corte