21 de mar. (Sentido Común) -- Alpek, el brazo petroquímico del conglomerado industrial Alfa, continúa aplicando las medidas necesarias para no perder posiciones ante la quiebra de su principal cliente, M&G Chemicals, uno de los mayores productores de PET a nivel mundial, subsidiaria de la empresa química italiana, Mossi Ghisolfi Group.

     En alianza con un par de compañías de su mismo sector, Alpek acordó adquirir en mil 125 millones de dólares –375 millones cada uno— la planta integrada de PTA y PET ubicada en Corpus Christi, Texas, que dejó de construir por problemas de liquidez su cliente M&G Resins USA, subsidiaria de M&G Chemicals.

     La oferta realizada por el grupo conformado por la compañía regiomontana, la petroquímica india Indorama Ventures Holdings y el conglomerado chino Far Eastern Investment, contempla también la planta de desalinización/caldera que abastece agua y vapor al proyecto de Corpus Christi, dijo Alpek en un comunicado.

     La mega planta texana será la “línea de producción verticalmente integrada en PTA-PET más grande en el mundo y la de mayor capacidad de PTA en América”, dijo Alpek en el comunicado.

     La alianza también contempla aportaciones de capital para terminar la construcción de la fábrica. Hasta octubre, tenía un avance de 80% para su primera fase, y una vez que esta etapa entre en operación, tardará un año en completar su capacidad total de producción.

     Corpus Christi tendrá la capacidad de generar 1.3 millones de toneladas anuales de ácido tereftálico purificado, o PTA, precursor del PET, uno de los plásticos más comunes en la actualidad que se utiliza predominantemente para empaques y del cual Alpek y sus socios esperan fabricar 1.1 millones de toneladas.

     Cuando la planta comience a operar, cada socio tendrá derecho de recibir un tercio del PTA y PET que ahí produzcan. Como parte del acuerdo cada uno adquirirá sus materias primas de forma independiente y también venderán y distribuirán los dos petroquímicos mediante sus propios canales.

     El acuerdo de compra, el cual ya tanteaba Alpek cuando menos desde octubre, forma parte de su estrategia para mantener los derechos de suministro que adquirió dos años atrás de M&G Resins USA para este proyecto en Corpus Christi y que son estratégicos para su operación.

     Tras la noticia sobre el acuerdo de compra de la planta de Corpus Christi, el precio de las acciones de Alpek cerraron con un alza de 3.1%, a un mayor ritmo que el índice de referencia S&P/BMV IPC que también subió, pero en 0.94%. En lo que va del año el rendimiento de los títulos de la petroquímica han elevado su valor 10.2%, una de las cinco mejores del índice, que a su vez registra una pérdida de 3.7%.

     Los analistas coincidieron en la importancia para Alpek de recuperar su inversión, o parte de ella, en M&G Resins USA, adicional a la necesidad de Alpek de fortalecer su integración vertical.

     “Aunque aún falta tiempo para que efectivamente se logre el acuerdo,  y se obtengan las autorizaciones correspondientes, es favorable que se muestre un avance en la situación de M&G y sobretodo, en relación a la inversión que Alpek mantenía en la construcción de dicha planta”, escribió Marissa Garza, analista de la casas de bolsa de Banorte Ixe, en su reporte.

     Alpek adquirió en 2016 derechos de suministro por 500 mil toneladas anuales de PET, por 453 millones de dólares, al centro de producción en Corpus Christi, a 100 kilómetros de la frontera con México. La compañía mexicana otorgó además un préstamo para su construcción por 90 millones de dólares.

     Debido a esto, Alpek es el segundo acreedor, después de Grupo Financiero Inbursa, el brazo financiero del grupo de empresas del empresario mexicano Carlos Slim, en ese centro de producción de PTA y PET, ubicado en Corpus Christi, que pretende ser la mayor planta de polímeros a nivel mundial.

     “El anuncio del día de hoy representa también una “recuperación” de activos, dijo por su parte Alik García, de la casa de bolsa de Intercam. “Lo que se desconoce es el monto que será aprovechado de los 435 millones de dólares desembolsados en el pasado, y la aportación adicional en efectivo que tendrá que hacer la empresa”.

     El valor estimado del proyecto, una vez terminado, es aproximadamente de dos mil millones de dólares, el doble de lo originalmente proyectado por M&G cuando comenzó a construirla, de acuerdo con cálculos de la industria, dijo Alpek en octubre durante una conferencia con analistas e inversionistas.

     Aún existen otros acreedores no garantizados que podrían obstaculizar el proceso de compra. De acuerdo con el diario Reforma, algunos de esos acreedores solicitaron al juez de la corte en Delaware encargado del proceso de bancarrota de M&G no reconocer la garantía de cobro que Alpek, por los derechos de suministro, al considerar que la empresa mexicana es socio y no acreedor de M&G, de acuerdo con un documento emitido por DAK Americas, filial de Alpek.

     Alpek ha logrado incrementar el control y estabilidad que necesita M&G Chemicals en su calidad de socios estratégicos y también ha ganado posiciones en las operaciones de M&G Chemicals en Altamira, en el estado de Tamaulipas, donde la compañía química tiene otra planta de producción de PET.

     En enero otorgó Alpek a M&G Polímeros México, otra subsidiaria de M&G Chemicals, un financiamiento por hasta 60 millones de dólares para reactivar las operaciones de la planta de PET de Altamira, algo que le permitió a Alpek continuar suministrando PTA a ese centro de producción tamaulipeco.

     Como parte de su estrategia en Altamira, Alpek adquirió en octubre la deuda de 100 millones de dólares que la planta tamaulipeca tenía con Grupo Financiero Inbursa, convirtiéndose así en el acreedor principal y un potencial adquiriente de este centro de producción con capacidad para generar 560 mil toneladas de PET al año.

     El despacho PJT Partners asesora la operación de la compra de la planta de Corpus Christi para Alpek en cuestiones financieras, mientras que Weil, Gotshal & Manges es el asesor legal.

     El cierre del acuerdo de adquisición por la planta de Corpus Christi todavía depende del cumplimiento de ciertas condiciones, incluyendo la aprobación de la corte de bancarrota de Delaware, así como el visto bueno de las autoridades competentes.

     La compra de la planta de M&G en Texas es la segunda adquisición en curso de Alpek, que en Brasil está en los últimos pasos para concretar la compra de las petroquímicas Suape y Citepe a Petrobras.


Fecha de publicación: 21/03/2018

Etiquetas: Alpek Alfa M&G PET producción Texas