21 de may. (Sentido Común)-- Aerolíneas Damojh, la línea aérea mexicana dueña de la aeronave que se estrelló el viernes minutos después de despegar de La Habana, sufrió una suspensión temporal de su operación, al mismo tiempo que será sujeta a una auditoría extraordinaria por parte de las autoridades de aviación mexicanas en el marco de señalamientos de supuestas irregularidades técnicas dadas a conocer por ex-empleados de la empresa a diversos medios de comunicación.

     La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) de México utilizará la información que recabe en esta revisión a las aeronaves de la empresa, comercialmente conocida como Global Air, para también apoyar la investigación oficial del accidente, donde perdieron la vida más de un centenar de personas, incluidos seis miembros de la tripulación de origen mexicano.

     “Los trabajos de investigación se encuentran en su fase inicial y la información sobre los avances de estos serán dados a conocer oportunamente, y de manera oficial, por las autoridades correspondientes”, dijo la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, la dependencia de la que depende la DGAC, en un comunicado.

     Por otro lado, las autoridades cubanas encabezan la investigación del siniestro, en donde también participan las autoridades aéreas mexicanas y estadounidenses –por ser el Estado de matrícula y producción de la aeronave--, así como la empresa aeronáutica Boeing, la armadora de la aeronave que tenía una antigüedad de casi 40 años.

     “Un equipo técnico de Boeing está listo para ayudar, de acuerdo con lo permitido por la legislación de Estados Unidos, bajo la dirección de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos y las autoridades cubanas”, dijo Boeing, en una declaración.

     Luego del incidente diversas voces de antiguos empleados, como el ex-piloto Marco Aurelio Hernández Carmona, externaron a medios de comunicación haber alertado con anterioridad a las autoridades sobre el supuesto mal mantenimiento de los aviones.

     En respuesta, DGAC dijo en un comunicado que tras haber recibido la denuncia del capitán Hernández, llevó a cabo una verificación extraordinaria a Damojh y suspendió en noviembre de 2013 una de sus aeronaves hasta que la aerolínea presentó la documentación para atender los requerimientos de verificación, algo que la compañía cumplió a inicios de 2014.

     Sentido Común se puso en contacto con Aerolíneas Damojh para conocer su opinión sobre los señalamientos del ex-piloto, pero la compañía prefirió no hacer declaraciones sobre esos dichos y dijo estar atenta a la investigación desde el enfoque oficial y de las autoridades.

     Además del desplome en Cuba, Damojh estuvo implicada en un aterrizaje forzoso en 2010 en Puerto Vallarta por un fallo en el tren de aterrizaje delantero en el cual no hubo víctimas, pero que le valió también a la empresa una verificación extraordinaria y la suspensión de sus actividades de la empresa por casi un mes, del 11 de noviembre al 18 de diciembre de ese año.



Fecha de publicación: 21/05/2018

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