Contrario a la idea convencional, en ocasiones es el hombre quien primero pierde la libido (el deseo sexual) en una relación a largo plazo, encontró un nuevo estudio.

El deseo de los hombres de tener relaciones sexuales puede ser tan complicado como el de las mujeres, dijeron investigadores de University of Kentucky. Los hombres a menudo pierden el interés cuando se sienten inseguros, cuando se preocupan por estar perdiendo autonomía en una relación, o cuando los cambios físicos les dan pena. La presión para ser el incitador aumenta el estrés.

“Esperamos que el deseo masculino siempre sea alto y sencillo, como un interruptor eléctrico, mientras esperamos que las mujeres deseen ser un conmutador complicado, pero ambos son complejos”, dice Kristen P. Mark, profesora asociada de promoción de la salud y directora de Sexual Health Promotion Lab en University of Kentucky e investigadora principal del estudio, una amplia mirada a los hombres y mujeres en la que se analizaron 64 estudios sobre el deseo sexual realizados desde la década de los cincuenta.

Los psicólogos dicen que el deseo en ambos sexos aumenta y disminuye. Y es natural que disminuya después del tórrido periodo de la luna de miel, que generalmente dura entre 18 meses y dos años. Aun así, casi 80% de las parejas casadas tienen relaciones sexuales varias veces o más al mes: 32% informó haber tenido relaciones sexuales dos o tres veces por semana; 47% informó haber tenido relaciones sexuales varias veces al mes, de acuerdo con to “The Social Organization of Sexuality: Sexual Practices in the United States”, un estudio de 1994 de University of Chicago considerado el más completo en este campo.

Las mujeres pierden el deseo más a menudo que los hombres: las investigaciones muestran que alrededor de una de cada tres mujeres --independientemente de su edad-- informan falta de interés en el sexo durante al menos varios meses el año pasado, en comparación con uno de cada cinco hombres, de acuerdo con Edward Laumann, profesor de sociología en University of Chicago, que ha estudiado el deseo y la disfunción sexual durante 25 años. Pero los expertos dijeron que los hombres a menudo están reacios a hablar sobre sus problemas sexuales, por lo que el problema puede ser más frecuente.

La investigación del Dr. Mark, publicada en marzo en la revista Journal of Sex Research, descubrió que las razones de la disminución de la libido generalmente se limitan a tres categorías principales: individual, interpersonal y social. Algunos problemas, como el estrés, una disminución de la autoestima o cambios en la atracción que sienten por su pareja, afectan tanto a hombres como a mujeres.

Pero el deseo de los hombres también disminuye por diferentes razones. Los hombres tienen problemas cuando esperan que su deseo siempre permanezca alto y no sucede así, o cuando no logran que su relación sea una prioridad. A veces el deseo de los hombres disminuye cuando una pareja tiene relaciones sexuales por razones negativas --para evitar un altercado, por ejemplo- en lugar de positivas, como para aumentar la intimidad. Los hombres también sienten la presión de estar siempre dispuestos a tener relaciones sexuales y a iniciar los escarceos.

A menudo también hay problemas físicos. El flujo sanguíneo es menos eficiente en el hombre a medida que envejece, padecimientos como la depresión o medicamentos para tratar problemas como la presión arterial alta o los trastornos del estado de ánimo pueden mermar el deseo sexual de un hombre.

Estos cambios físicos pueden causar angustia emocional. La vergüenza es un gran problema para los hombres que tienen problemas para conseguir o mantener una erección, por lo que pueden dejar de iniciar el sexo. “En los hombre a los que no les gusta hacer lo que no hacen bien, habrá evasión, porque se sienten avergonzados”, dijo Michael A. Perelman, codirector del Programa de Sexualidad Humana de Weill Cornell Medicine.

A diferencia de las mujeres, los hombres a menudo pierden el interés en el sexo cuando son infelices o están inseguros, dijo el Dr. Laumann. El estrés acerca de obtener un ascenso, la preocupación por un niño, la transición a la jubilación “todo socava la percepción de un hombre acerca de sus habilidades y destreza”.

A veces el problema proviene de la relación. El sexo puede convertirse en rutina en un matrimonio a largo plazo, o los compañeros crecen de manera diferente. Un hombre puede albergar resentimientos, a menudo sobre el dinero. O puede ya no erotizar a su esposa. “Él la ve como una buena persona, madre, defensora, pero ya no como una amante apasionada”, dijo Barry McCarthy, profesor de psicología de American University.

¿Está una relación condenada cuando un hombre --o una mujer, en realidad- pierde interés en el sexo? No necesariamente.

Aunque definitivamente es una señal de que se debe analizar lo que está sucediendo. También hay la posibilidad de que una disminución en el deseo por su pareja pueda indicar que la persona ya no es adecuada para usted, dijo Gurit Birnbaum, un psicólogo social y profesor asociado de psicología en el Centro Interdisciplinario, una universidad privada de Herzliya, Israel.

Es posible que usted haya crecido de otra manera, o que sus objetivos, valores o intereses hayan cambiado. “Tu cuerpo puede estar diciéndole algo”, dijo.

Pero a menudo los problemas se pueden resolver. Esto requerirá hablar, dijeron expertos, y es importante hacerlo antes de que sea demasiado tarde. “Una relación se vuelve más lábil cuando pierde su aspecto sexual”, dijo el Dr. Birnbaum.

Comience por tener una conversación ajena a la relación sexual: vaya a caminar o tomen una copa de vino. Dígale a su pareja que echa de menos tener relaciones sexuales en lugar de criticar.

Ambas partes deberían aliviar la presión aceptando que los hombres, no solo las mujeres, no desean tener relaciones sexuales todo el tiempo. “Enfrentar las conversaciones difíciles siendo vulnerable de antemano crea automáticamente un entorno más seguro para abordar una conversación difícil”, dijo el Dr. Mark.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo

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Fecha de publicación: 07/06/2018