No hace mucho tiempo, los teléfonos Galaxy Note de Samsung eran prácticamente una atracción de circo. ¡Adelante, amigos, y deleiten sus ojos con el teléfono más descomunal y enorme que haya podido conocer la humanidad!

Ahora, cuando tomo el Galaxy Note 9 de 6.4 pulgadas, el modelo más novedoso de la serie, éste parece casi normal. De alguna manera nos acostumbramos a los teléfonos del tamaño de una rebanada de pan aproximadamente.

Sin embargo, de otra manera, el Note 9 todavía sobresale del mar de rectángulos vítreos. Ningún teléfono en el mercado de Estados Unidos tiene más funciones o más capacidad de procesamiento. Tiene un lápiz óptico integrado que es mucho más que una herramienta de dibujo, y la suficiente capacidad de procesamiento, almacenamiento y RAM como para competir con su computadora portátil: incluso tiene un programa integrado que lo convierte en una computadora personal.

El Note 9 no está compitiendo realmente con otros teléfonos inteligentes. Dispositivos como el iPhone X o el Pixel 2 XL son como sedanes sofisticados, atractivos pero prácticos. Usar el Note 9 es como conducir una nave espacial por la autopista a Cuernavaca --si la estación espacial internacional está en su agenda, ¡genial! Incluso Samsung dice que la mayoría de los compradores del Note tienden a ser propietarios de Notes anteriores.

Sin embargo, ese es el problema cuando se trata de atraer nuevos usuarios: para los no iniciados, éste más bien se parece un poco a la costosa exageración.

 

Sedientos de capacidad de procesamiento

El Note 9 no es físicamente muy diferente al Note 8. Es un rectángulo delgado, pulido y largo, como si tomaras un teléfono más pequeño y lo estiraras como caramelo. Viene en dos colores, lavanda y azul. Tiene un conector para auriculares, un lector de huellas digitales, un escáner de iris, tres cámaras, dos altavoces y una ranura para tarjetas microSD.

En el interior, el Note 9 ofrece avances significativos en relación al modelo del año pasado. Tiene una gran batería de cuatro mil miliamperios; las baterías de los iPhones más grandes de Apple tienen menos de tres mil miliamperios. Evidentemente, dos años después del gran escándalo por la combustión de sus teléfonos, Samsung confía lo suficiente en su tecnología de baterías como para volver a ponerle toda la capacidad que pueda a sus unidades.

La duración de la batería del Note 9 es correspondientemente impresionante: cuando lo usé para cosas telefónicas normales, obtuve casi dos días completos de funcionamiento entre carga y carga.

La cuestión es que nadie comprará un Note 9 para hacer las cosas telefónicas normales. La gente comprará uno porque viene con hasta ocho gigabites en RAM y 512 gigabites de memoria a un precio de mil 250 dólares (cerca de 23 mil 500 pesos, más económico que el nuevo y costoso iPhone), lo que significa que también pueden ejecutar una docena de aplicaciones mientras juega, escucha música y graban videos 4K; básicamente, todo al mismo tiempo.

Comprarán uno para jugar “Fortnite”, que se ve muy bien en su pantalla que es grande y nítida. Entonces, la batería del Note 9 solo le durará un día, pero puede presionarla mucho y durarle funcionando hasta la hora de dormir.

Mis pruebas con el Note 9 rápidamente dejaron de ser sobre el rendimiento de la cámara o la nitidez de la pantalla. El Note 9 funcionó bien en todas ellas. Aparte del precio inicial de mil dólares (18 mil 800 pesos) y el hecho de que no viene con la última versión de Android, todas las especificaciones del Note 9 son excepcionales.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo           

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Fecha de publicación: 24/09/2018