La batalla contra el abuso de opioides podría tener una nueva herramienta en su arsenal: Twitter.

Investigaciones indican que el sitio electrónico proporciona una instantánea, rápida y confiable idea de quién está consumiendo qué drogas y dónde en todo un país. Los estudios epidemiológicos tradicionales, por el contrario, pueden tardar años en proporcionar esa información.

Los expertos esperan que al analizar los tweets basados en el contenido relacionado con los estupefacientes, se puedan anticipar los aumentos que se detectan en las sobredosis y prevenirlos con campañas de salud pública.

Dicha investigación está comenzando a intensificarse a medida que los algoritmos de aprendizaje automático mejoran en el peinado de cientos de miles de tweets e identifican áreas de riesgo sobre el aumento inminente de muertes por sobredosis de opioides.

En los últimos 20 años, más de 300 mil estadounidenses han muerto en Estados Unidos por el consumo de opioides. De acuerdo con Centers for Disease Control and Prevention (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades), en 2017, aproximadamente dos tercios de todas las muertes por sobredosis de estupefacientes (47 mil 600 muertes) involucraron opioides.

Un estudio publicado el pasado mes de abril en la revista Substance Use & Maluse encontró que la presencia de conversaciones de Twitter sobre 50 temas diferentes relacionados con opioides en varios estados y ciertos condados se correlacionaron con tasas de mortalidad por sobredosis de opioides en esos lugares.

“Lo que se obtiene de Twitter es un panorama más profundo de las diferencias geográficas en las actitudes y los patrones de consumo de las personas”, dijo Lyle Ungar, profesor de informática y ciencias de la información en University of Pennsylvania y coautor del estudio, que fue financiado parcialmente por el Departamento de Salud de Pennsylvania. “Si podemos entender las diferentes actitudes en las diferentes comunidades, es posible que podamos diseñar campañas de salud pública más efectivas”.

Food and Drug Administration (FDA, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EUA) también supervisa las plataformas de las redes sociales en busca de conversaciones sobre estupefacientes específicos. “Cuando surge una nueva sustancia, queremos saber de eso lo más pronto posible”, dijo el Dr. Douglas Throckmorton, subdirector de programas regulatorios de la dependencia.

Para mejorar el monitoreo, muchos investigadores han automatizado el proceso, creando un programa que puede determinar qué mensajes son relevantes. Sin embargo, interpretar el lenguaje comprimido o codificado de un tuit puede ser difícil. Los mensajes pueden ser sarcásticos, jerga, escritos incorrectamente o escritos para codificar deliberadamente el contenido. También las personas pueden estar tuiteando sobre sustancias de las que los investigadores nunca han oído hablar.

Abeed Sarker, investigador asociado del departamento de bioestadística, epidemiología e informática de Perelman School of Medicine de University of Pennsylvania, está tratando de crear un sistema de aprendizaje automático que clasifique cientos de miles de tuits relacionados con las drogas en tres grupos --consumo excesivo, médico y el no uso-- y que también detecte cambios en las conversaciones de Twitter con el paso del tiempo.

La esperanza es predecir las tendencias futuras de los estupefacientes y ayudar a prevenir una crisis en toda regla, dijo el Dr. Sarker, quien recibió una subvención de 400 mil dólares de National Institute on Drug Abuse para ayudar a financiar su proyecto.

La mayoría de las investigaciones en esta área analizan grandes grupos de personas, a nivel de condado o estado. Los tuits son información pública, a menos que los usuarios vuelvan privadas sus cuentas. Los tuits pueden incluir la ubicación, aunque los investigadores no tienen acceso a la información de identificación que los usuarios no han compartido públicamente. Pero las preguntas sobre la privacidad surgen cuando los investigadores intentan hacer una investigación más detallada sobre individuos específicos, que podrían estar vendiendo o consumiendo drogas.

Algunos investigadores están estudiando cómo usar los tuits para detectar vendedores de drogas ilícitas en línea.

Un equipo liderado por Timothy Mackey de University of California en San Diego, ha estado estudiando la venta de drogas ilícitas en plataformas de redes sociales.

En un estudio que publicaron el año pasado en la revista Journal of Medical Internet Research, los investigadores analizaron 117 mil tuits e identificaron 692 que contenían palabras como codeína, hidrocodona, comprar, barato y con descuento.

De estos se identificaron 34 tuits vinculados a una farmacia en línea ilícita, vendedores individuales o sitios de internet vinculados a sitios afiliados. Los investigadores dijeron que sus métodos podrían usarse para identificar e informar sobre ventas y vendedores ilegales en línea.

“La forma en que veo a un narcotraficante en Twitter es la misma manera que veo a un narcotraficante en la calle”, dijo el Dr. Mackey, quien agregó que cualquiera debería poder reportar esta actividad a las autoridades.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo           

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Fecha de publicación: 14/03/2019